lunes, 14 de diciembre de 2009

El gesto de la Muerte

Es un cuento de Las Mil y Una Noches, que revisó Cocteau; que siempre me hizo pensar y que ayer después de ver la peli La Casa del Lago me vino a la cabeza. Ahí os lo dejo.

Érase una vez, en la ciudad de Bagdad, un criado que servía a un rico mercader. Un día, muy de mañana, el criado se dirigió al mercado para hacer la compra. Pero esa mañana no fue como todas las demás, porque esa mañana vio allí a la Muerte y porque la Muerte le hizo un gesto.

Aterrado, el criado volvió a la casa del mercader.

—Amo —le dijo—, déjame el caballo más veloz de la casa. Esta noche quiero estar muy lejos de Bagdad. Esta noche quiero estar en la remota ciudad de Ispahán.

—Pero ¿por qué quieres huir?

—Porque he visto a la Muerte en el mercado y me ha hecho un gesto de amenaza.

El mercader se compadeció de él y le dejó el caballo y el criado partió con la esperanza de estar por la noche en Ispahán.

Por la tarde, el propio mercader fue al mercado, y, como le había sucedido antes al criado, también él vio a la Muerte.

—Muerte —le dijo acercándose a ella—, ¿por qué le has hecho un gesto de amenaza a mi criado?

—¿Un gesto de amenaza? —contestó la Muerte—. No, no ha sido un gesto de amenaza, sino de asombro. Me ha sorprendido verlo aquí, tan lejos de Ispahán, porque esta noche debo llevarme en Ispahán a tu criado.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Táctica y Estrategia

Ayer en un curso de esos que hago ahora para directivos, el responsable de RRHH de Cajamar nos leyó este poema de Mario Benedetti; y aunque el bueno de Mario pensara en el amor (imagino) es tremendamente aplicable al laburo. Disfrutad de su belleza, pero sobre todo meditadlo y tratad de diferenciar entre táctica y estrategia en vuestros proyectos.

Mi táctica es
mirarte
aprender como sos
quererte como sos.

Mi táctica es
hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible.

Mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme en vos.

Mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos.

Mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple.

Mi estrategia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites.

martes, 24 de noviembre de 2009

Lo correcto

Estaba tratando de convencerme de que era lo que debía hacer, pero si era tan correcto porque me sentía tan mal; había hecho lo correcto, para lo que me habían educado, pero cuando la policía se llevo a Mijail sentí una presión en el pecho como nunca antes.

Me quedé sentado en la cocina mirando a través de la ventana el Lada que el Partido me había entregado por mi nuevo cargo, pero se habían llevado a Mijail; cogí distraídamente unas ciruelas mientras iba a ponerme el traje para dirigirme a mi nuevo despacho en el Polit Buró, tratando de recordándome a mí mismo todos los desvíos capitalistas de Mijail, pero solo conseguía recordar cuando jugábamos juntos en la Plaza de los Teatros y todas las aventuras que corrimos en aquel jardín.

Gracias a mis influencias conseguí saber el Gulag en el que estaba el otrora amigo de la infancia, le dejé mil mensajes pero no respondió a ninguno y la zozobra se convirtió en una compañera más en mi vida, me centré en mi trabajo y en el servicio al Partido.

Hoy hace casi veinte años de aquello y un tocayo de mi amigo nos habla de la Glasnost y le da la vuelta a una vida guiada por los principios aprendidos en la niñez y de repente la Revolución no tenía sentido y entonces ¿tenía sentido mi vida?

Y ese día de repente la acción que había marcado mi vida dejaba de tener sentido, ese día de repente ya no era lo correcto y todo mi orden de valores se desmoronaba, toda una vida dedicada a tratar de convencerme de que debía hacer lo correcto y sobre todo que un día tomé la decisión que el Partido y la Revolución esperaban de mí y de un plumazo, un tipo al que ni conocía, lo barrió y convirtió aquella acción en algo despreciable, una conclusión que llevaba negándome tantos años.

Estaba claro que no podía hacer otra cosa que coger mi pistola reglamentaria y…

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Míticos

La Cuadra: un garito muy pequeño en General Pardiñas, era como ir al recreo del cole, allí estaba todo el mundo. Recuerdo el cumple de Marta Haendler y un conato de movida de la que me sacaron unos chavales de clase con los que no me llevaba especialmente bien, pero que por encima de todo estaba el cole. Mario y yo con pendiente y los vodkas con naranja.

Jacara: primera discoteca en serio y garito mítico de la postmovida Madrileña, donde los juntábamos los niños del barrio, el local sigue ahí en Principe de Vergara, la entrada de atrás estaba en frente de La Cuadra y era por la que resultaba más fácil entrar; aquí hicimos los primero y más patéticos intentos de ligar y la canción del Imperio de los Nikis se convirtió en un himno.

El Happy: pequeño pub en la avenida de Nazaret, hoy un buen restaurante, en el que siempre terminábamos tomando copas después de aquellas cenas en el chino con los chicos del grupo, era donde nos quedábamos hasta el final Juan Carlos, Martuca y yo; y luego a Conde Cartagena para dar un paseíto.

Chapandaz: y su mítica leche de pantera, ahí conocí a mi admirada Paloma. Su ubicación en Moncloa era fantástica después de haberme ido a vivir a la sierra.

La Casa de la Cerveza y sus submarinos, cuantas tardes en Juan Bravo, de hecho es un local que todavía frecuentamos, que está hermanado con el Chapanzaz. Aquí se forjó la historia más importante de mi vida.

Nabo de Lugo/La Mancha: dos bares normales en un callejón entre Pardiñas y Mola, pero que servían minis de cerveza y patatas bravas, la dieta de cualquier adolescente que se precie. Lo bueno es que en la Mancha los camareros iban con camisas de rallas verdes y blancas (algo bastante de moda en aquel entonces) y Nacho Lora no tenía otra camisa aquella tarde, jejeje. Tenemos también el dudoso honor de haber acabado con el tequila en el Nabo en un partido del Madrid a chupito el gol.

San Antonio: discoteca-balneario de L.A. ¡grande! yo me quedaba flipado de la cantidad de calcetines blancos por metro cuadrado; pero guardo muy buenos recuerdos de los primeros años del grupo de la playa.

TBO: garitazo de Los Narejos, con sus gogos y sus fiestas de la espuma de serie, la verdad es que fueron noches inolvidables en la playa.

La Cerve: Galapagar nada más llegar, con los compis del insti, es el sitio en el que cumplí 18 y donde empecé a aficionarme a las cervezas raras, tenían todas; de hecho es el primer garito que yo recuerdo con una amplia carta de cervezas.

La Fundación: más conocida como la Fundata, en Salustiano Alozaga, cerca de Recoletos ideal para coger el tren y seguir de copas por la sierra, este garito es responsable de que haberme ido a la sierra no fuera tan complicado, ya que todas las noches podía estar allí con mi primo.

El Cardenal/Los doce robles: mediados de los noventa con los chavales de siempre, ambos en Bilbao y nos traen recuerdos increíbles: minis, chicas, bailes, … fueron probablemente las noches más locas de aquella época en la que todo daba igual.

Thersipcore: tergicholi: es más o menos en los mismos años que los anteriores pero en la sierra, de las cosas que pasaron aquellos días nos ganamos el sobrenombre de “Historias del Kronen”.

Don Chupito/ Pelotazo: en la misma época que los anteriores, pero en la Playa, unas noches de locura en las que llegamos a ser los gogos de un garito, noches en las que nuestros pectorales y esos brazacos eran la admirados a partes iguales con nuestra capacidad con los coscorrones.

Búho: los de los calcetos blancos de S. Antonio cuando crecían y aumentaban en horterez se juntaban en un sitio con “clase”, y allí íbamos nosotros, no sé bien a qué, pero allí estábamos partiendo la pana.

La Tortuga: se me empañan los ojos recordando este garitazo de Alpedrete, testigo de mis primeros amaneceres en COU y la primera vez que me entraron (y no la última, mamones que sé lo que estáis pensando). Because the night belongs to lovers, el baile con Ana María del ojala que llueva … con todo el garito parado, o cuando entramos en plan superman.

El Mancha: bareto de Vilecha en el que cayeron un par de manchaditos con todo el que ha ido a conocer mi pueblo, pero especialmente memorable con mis hermanos e Iván y todo el mundo pagándonos una ronda e ir a dormir la siesta directamente mientras mi padre trataba de explicárselo al abuelo.

Jalisco: Galapagar en estado puro, destacable el campeonato de cerveza, el “todos tenemos más” en un espectáculo de boys, los destornilladores que nos preparaba Roberta, …

El Bunker: simplemente era el sótano de la casa de los Pérez, pero todo lo que pudimos vivir allí es tan difícil de resumir que lo dejaremos aquí.

Equinoccio: los jueves por la noche eran el día, o mejor dicho la noche y eran días en los que podías perfectamente llegar al curro de empalmada después de una ducha de agua fría y luego quedarte a las cañas.

Gambrinus de Ibiza: bareto de reunión del grupo del cole, mola tanto que aún nos juntamos de vez en cuando por allí, aquí empezamos a disfrutar más de una caña charlando con los amigos que de unas copas en un garitazo persiguiendo chatinas.

La facultad de Veterinaria: fiestas increibles en las que llegué a tener un 100% de efectividad y lugar en el se formalizó la historía más importante de mi vida.

El Ratón Vaquero: mítico entre los míticos, local de los incomparables Pablo Carbonell y Santiago Urrialde, esa esquina esconde tantas historias y tantos secretos que es una pena desvelarlos. Pero esas noches de verano en la terracita con los Sanchos disfrutando de la filosofía del colgao del 24, o los gintonics con Mariete y Marta y la siguiente llamada es de estamos en el hospital que ya ha nacido.

El Bo Finn: un sitio al que puedes ir en cualquier momento y siempre te vas a encontrar a alguien; es el garito de la banda del Rugby, pero también con los de la uni y como olvidar aquella partida de billar con Ramón, o descubrirme a mi mismo encima de la mesa con los pantalones por los tobillos marcando gallumbos con la bandera Argentina tras su clasificación para semis, el 2X1, todos los seis naciones, ...

Y alguno más que se me ha quedado en el tintero, pero esto es un buen resumen.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Ensaladas 3

Espinacas, huevo poché y parmesano; excelente combinación, se aliñan las espinacas y luego se colocan los huevos encima y se cubre de parmesano, romper bien para que la yema unte todas las hojas.

Lombarda cruda, lechugas diversas, zanahoria, huevo duro, maíz y anchoas; sazonado con una vinagreta de picual, orégano y mostaza. Podéis hacer una variación sustituyendo el huevo y las anchoas por pollo a la plancha y queso parmesano.

Atún y mejillones: con diversas lechugas, lombarda incluida y por qué no zanahoria rallada, mezclamos bien atún y mejillones en escabeche, un chorrito de aceite y queso parmesano, luego añadimos las verduras y mezclamos.

Tomate, aguacate y langostinos: primero picamos los tomates y los aliñamos con cebolla seca picada, perejil, vinagre de manzana, AOVE, sal gorda y el líquido de la cabeza de los langostinos bien tamizado para evitar encontrarnos bigotes; luego picamos el aguacate y colocamos los langostinos.

Lombarda cruda aderezada con vinagre de jerez, AOVE, sal, mostaza y cominos, sencillo y fantástico

martes, 3 de noviembre de 2009

Otoño

Hoy estoy un poco rollito escolar y me apetece hacer una redacción sobre el otoño; aunque el otoño empiece el 21 de Septiembre, yo siempre he considerado que empezaba a principios de Septiembre. El otoño es una época muy curiosa en un par de meses se puede pasar de la luminosidad del verano a los grises del invierno.

Es un ciclo tendente a desaparecer ya que evolucionamos hacía un mundo con dos estaciones y mi pobre peque no conocerá esta época tan amarilla que la verdad tiene su punto y es la estación que genera recuerdos más dispares en todos nosotros, podemos pasar de la exaltación a la tristeza más absoluta.

El otoño es el comienzo del curso escolar y con él de miles de historias que nos han ido marcando hasta el día de hoy, historias en las que vuelves a ser un niño y que por lo general la realidad te separa bruscamente a través de un correo o una llamada al móvil y te recuerda que todos aquellos días, que aunque parecen cercanos, son muy, muy lejanos y ahora tienes que estar a tus cosas y el otoño no va a hacerte un año mayor empezando un nuevo curso.

En otoño me han pasado tantas cosas; en mi otoño acabe la carrera, me casé, nació mi peque, volvió a nacer mi hermano en este 2009 tan convulso. Es la época adecuada para el comienzo y para el fin de tantas y tantas cosas que es una pena que vaya a dejar de existir porque no somos capaces de cuidar este planeta, así que no os voy a engañar hoy estoy un poco escolar, pero bastante triste.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Los Puentes de Madison

El otro día pusieron en la tele Los Puentes de Madison, la famosa peli del gemelo gay de nuestro admirado Clint, y después de 15 años de mantener una promesa y a sabiendas de que la contraparte la había incumplido mucho tiempo atrás decidí verla; no os voy a engañar la peli me hizo sentir un nudo en la garganta que…

Pero este post no va de la peli, sino de mediados de los noventa cuando mi cuerpo estaba en Madrid y mi cabeza en Murcia. Creo que forjamos una amistad para siempre, de hecho a día de hoy seguimos todos juntos, más o menos; algunos han caído pero cuando nos juntamos volvemos a ser los de siempre, es lo que tiene hacerse mayor, dejas de valorar las cosas realmente importantes y te preocupas por chorradas como la hipoteca, el curro o el coche.

Éramos los mejores, nuestro rincón del muro del paseo marítimo sigue intacto y esperando esos pocos días en los que aún nos juntamos, aunque ahora esté triunfando el rollito casa rural, que la verdad es un punto y no dejo de felicitar a los jefes que se encargan de organizarlo.

Aún recuerdo cuando dijimos, Dios nos hemos hecho mayores, hemos quedado a las cuatro para tomar café y estamos tomando café en la terraza y no una copita jugando al billar, o aquellas tardes sin final jugando al futbol o al vóley en la playa; con la única intención de tratar de impresionar a alguna niña.

Aquellos días en los que me escapaba a Murcia y me refugiaba en Las Jarras, nunca habrá un camarero como el Puzles; a veces rememoro todas aquellas historias, de cuando el Conde Crápula pedía asilo político y siempre pasaban mil cosas en un finde, de cuando cada día llegaba una carta y yo escribía sin parar.

Míticas historias como el cumple de Ana, “la abuela al morir”, la cucaña, las fiestas de la espuma, tomar margaritas dentro del mar, el club de los poetas muertos, EUDLF, … quedaran para siempre en el recuerdo de todos nosotros y por eso y porque quiero que nada nos separe nunca, quiero recordar a Iván, Paqui, Curri, Eva, Queen, Santi, Carol, Tender, Mc Gregor, Grobert, Isa, Alfonso, Fran, Mado, Ana, Elenita, Alberto, Aurora, Daniel, … y tantos otros que pasaron aunque sea esporádicamente por nuestras vidas.

lunes, 26 de octubre de 2009

Ensalada Louisina de VIPS

Es un tema apasionante al que llegué por una charla con una querida amiga sobre las ensaladas del VIPS, y parece que ésta en concreto es el secreto mejor guardado de internete. De momento tengo lo siguiente: en cuanto a ingredientes lo visible por todos: lechugas varias (romana, iceberg y hoja de roble -creo-), bacón frito, pimiento rojo crudo, picatostes (denominado croutons por los afrancesados), cebolla frita, pollo y una salsa.

Yendo por partes la cebolla frita, se puede comprar en IKEA, por ejemplo, pero qué demonios vamos a tratar de hacerla como Dios manda. Lo primero es usar cebolla morada o escalonias (ya sabes que los horterillas las llaman chalotas) y cortada fina tenerla un tiempo en leche con pimienta para que se ponga tersa. Una vez bien escurrida freírla en abundante aceite muy caliente y secarla en un papel absorvente, salar convenientemente.

El pollo otro temita, hay que macerarlo previamente en aceite, abundante miel, bourbon, pimienta, perejil, ajo picado, unas gotas de limón y soja. Lo tenemos ahí mínimo una horita y a la plancha con ello en dados.

Y el gran misterio, parece que el tema es una salsa de mayonesa, bourbon, melaza, ajo picado, cebolla picada y perejil; aunque no creo mucho en ello porque no me parece que la base sea una mayonesa; así que yo voy a probar a dorar cebolla fresca bien picada en mantequilla y fuera del fuego añadir yogur y el liquido de maceración del pollo.

Para los que hemos vivido en Madrid y ahora estamos lejos el VIPS es el gran añorado, un sitio en el que puedes comer cualquier cosilla a cualquier hora; así que espero que con esto lo echeis en falta algo menos.

viernes, 9 de octubre de 2009

Macarrones con anchoas sin ellas

Un curioso plato que preparó mi chica el otro día y la verdad es que resultó increíble. Coced la pasta, lo más blanca posible para que todo el sabor lo den las anchoas; una vez cocida escurrir y en la olla echad un poco de aceite y cuando se haya calentado echad unos ajos y unas anchoas, una vez disueltas las anchoas añadid los macarrones y salteadlos un poco, añadiendo algo de pimiento asado y retirad del fuego, cascar un par de huevos para que tenga algo de untuosidad y abundante queso rallado y un chorrito de AOVE.

El resultado es excelente, una de esas cosas que te dejan muy sorprendido os animo a hacerlo.

jueves, 8 de octubre de 2009

El anillo

Esta es una de esas historias que solo me pasan a mí, y verdad es que ahora me río, aunque aquel día … Bueno empezaremos por el principio, esa semana vinieron mi hermano mediano y un amigo a visitarme al sur, yo apenas llevaba unos meses por aquí, y primero vinieron los chicos y en el finde venían sus novias; así que tenía a los muchachos desatados y el jueves salimos a ver cómo estaban los garitos de por aquí y después de mil copas y de decirle a una que se parecía a la Lore de Aída (que encima le gusto, ojito al nivel) decidimos que ya era hora de volvernos a casa.

Ahí estábamos nosotros con nuestras copas paseando por el paseo marítimo y el mar venga a decirnos, en su lenguaje como decía Mecano, “bañaos”, “no seáis tontos, que mola” y otras muchas cosas. Total que no teníamos otra que hacerle caso.

Y como casi siempre que uno se baña en el entrono de las seis de la mañana, la indumentaria es la misma, vamos ninguna. Yo que soy muy cuidadoso metí todo en los bolsillos de mi pantalón; las gafas, la alianza, las llaves, … y al agua patos.

Bueno pues uno de los nuestros no se bañó y se le ocurrió que sería graciosísimo coger la ropa y salir corriendo, desde el agua, que le veíamos perfectamente le dijimos: pero ¿qué haces memo? Así que el tío soltó la ropa y nos reímos todos.

Risa que torno en llanto cuando al salir del agua me pongo los pantalones y descubro, realmente atónito, que tenía los bolsillos vacios: las llaves, las gafas, la cartera, el móvil, pero sobretodo el anillo de boda; en ese momento pensé en todo lo que me haría Patricia y creí que lo más justo sería hacérselo al muchacho este; pero la sangre no llegó al río.

Así que nos pusimos a buscar, ayudados de la increíble luz que desprenden los móviles, encontramos mi teléfono y ya teníamos tres “superlinternas”; y aquello no avanzaba, así que el muchacho en cuestión ideó un plan, lo cierto es que brillante, que consistía en llamar a la policía y decirles que mientras nos bañábamos unos mamarrachos habían intentado robarnos la ropa y como les pillamos la soltaron, pero no encontrábamos las llaves ni demás. Lo que era técnicamente cierto.

La verdad es que yo lo estaba pasando bastante mal, porque sin gafas no aportaba nada al equipo y … pero llegaron los polis con sus linternas de verdad y enseguida aparecieron mis gafas lo que hizo que nos viniéramos arriba, luego la cartera, las llaves y alguna moneda suelta; pero del anillo ni rastro y los polis dieron por cumplida su misión tratando de explicarnos lo de una aguja en un pajar.

Así que decidimos volvernos a casa y por el paseo el chico este se sentía fatal, y yo le decía peor me voy a sentir yo cuando se entere la jefa, pero que no se preocupara que teníamos casi todo y que íbamos dormir en la casa, algo por lo que yo no apostaba.

Cuando llegamos a casa el tío me pide una linterna y le digo que no hace falta que es imposible, bla, bla, bla. Pero el tío cogió la linterna y se fue con mi hermano a buscarlo, yo como tenía que currar, a la cama.

A la mañana siguiente, suena el despertador y lo primero que veo es el anillo en mi dedo y lo primero que pensé: vaya sueño raro que he tenido esta noche; y luego me di cuenta de que había sido verdad y entonces pensé: qué Nieves Herrero son estos poniéndome el anillo mientras dormía; pero por lo visto hablé con ellos y demás.

El asunto es que todo acabó bien y que ahora nos reímos con aquella historieta, que poco a poco ha ayudado a forjar nuestro carácter.

martes, 6 de octubre de 2009

Las tribulaciones de Camilo en China

Lo primero es pedirle perdón a Julio Verne por el saqueo, y lo segundo es que llevaba un tiempo pensando en escribir sobre aquellas 5 maravillosas semanas entre Tianjin y Pekín, lo cierto es que ahora se recuerdan con cariño y como algo genial, pero tuvieron su aquel.

Bueno empezaré por el principio, salimos con retraso de Madrid lo que era una alegría teniendo en cuenta que para la conexión en Amsterdam teníamos muy poco tiempo. Fue divertidísimo ver los folletos del aeropuerto y comprobar que de una puerta a la otra se tardaban 15 minutos y que nosotros disponíamos de 10, esa clásica escena de todas las pelis corriendo por el aeropuerto, parecíamos delincuentes y yo pensé como nos pare un policía a ver cómo le explicamos que perdemos el vuelo en 5 minutos, que era el tiempo que teníamos al final; yo tenía pensado decirle que era el Duque de Alba y que los discutíamos junto al fuego, pero al final la sangre no llegó al río y cogimos el avión a Pekín, con el corazón saliéndosenos por la boca, pero lo cogimos.

Por fin 10 horas después de estar en un sitio diseñado para alguien que mide 1,20m. estábamos en Pekín, todo nos impresionaba; los letreros, la gente, esos policías que me llegaban a la cintura, … Habían ido a buscarnos y nos llevaron a Tianjin, todo era diferente, en ese momento nos llamaba la atención hasta el color del césped. Nos dejaron en el hotel y nos dijeron que descansásemos que nos recogerían para cenar. Decidimos que lo mejor era hacerse al horario local cuanto antes y a las dos bajamos a comer al restaurante del hotel, nos decidimos por un arroz tres delicias que era lo más parecido al chino del barrio.

Ese primer día nos dieron una vuelta por Tianjin y nos fuimos a un acuario, muy chulo con un montón de peces distintos, con sus caminitos de madera y en estas estaba yo disfrutando del paseo cuando Riu Liu viene y me da una redecilla, y yo le pregunto para qué y me dice para pescar la cena … os podéis imaginar mi cara ¡¡estabamos en un restaurante no en un acuario!!

Al día siguiente después de una ligera reunión matutina, nos dijo Teresa Li, vamos a comer a un campo de futbol, que cosa más chula pensé yo. El sitio era curioso, se veía el campo, aunque hacía varios años que allí no se jugaba, pero bueno. Comida de Shanghái nos dijeron, desde entonces tengo apuntado no comer en Shanghái, os comento decidimos comer pollo, en plena gripe aviar por cierto, que retrasamos en viaje un par de veces por las recomendaciones de la OMS, pues bien allí estaba el pollo, estaban las salsas, pero a alguien se le había olvidado pasar el pollo por el horno. ¡Pollo crudo! Y ¡entero! Ahí estaba con su cresta y su pico mirándote, lo probé y efectivamente sabía a pollo crudo una tela, queridos; así que allí estaba yo comiendo pollo crudo para no ofender a nuestros anfitriones.

Estuvimos viendo las grandes obras de infraestructura de la ciudad, fuimos al puerto que era realmente impresionante, con un montón de grúas Post-Panamax, y fuimos a comer, cosa que yo ya había empezado a temer, y la verdad es que estaba todo muy bueno, pescadito, cigalas a la plancha con algo de picante, langosta cocida (lo especifico porque no siempre era así, ya os contaré) y de repente unas gambas que tenían una pinta, vamos para tocarles palmas, cojo mis palillos (después de dos días Teresa ya me dejaba usarlos, al principio me obligaba a tirar de tenedor que me daba la sensación del niño pequeño al que no le dejan el cuchillo) me meto la gamba en la boca y noto un sabor extraño, y le pregunto a Riu ¿estas gambas? Y sin despeinarse me responde: “gambas en almíbar” Os podéis imaginar mi cara, pero por favor que eso son los melocotones, ¿a alguien le falta una hoja de su libro de cocina?

Otro día fuimos a ver las obras del metro, lo que más me impresionó fue que por lo visto se descapitalizaron y pusieron un anuncio para que voluntarios fueran a echar una mano a la obra, vamos el clásico a picar piedra y aparecieron 2.000 tíos de media durante 14 días, igualico que en España, pensé yo. Ese día fuimos en el que celebraban las bodas de la alta sociedad y vaya tela, ese rojo, ese dorado; esta claro que la alta sociedad de aquí podría vivir feliz en Bronstoles, los salones de boda son muy parecidos.

Los findes nos íbamos a Pekín, el primero me dejé el móvil y el pasaporte en Tianjin, y fue realmente complicado conseguir una habitación sin documentación, pero bueno conseguimos una y nos lanzamos a hacer lo que hace todo el mundo en Pekín comprar en mercadillos, me llevé de todo y aún me arrepiento de no haber pillado aquellos 10 polos a 10 euros. De todas maneras de Pekín me llevo mil cosas: la ciudad prohibida, gente vestida como cuando Mao, el club Suzie Wong (un antiguo fumadero de opio en el que tomábamos tequila tumbados), la Gran Muralla (están locos estos romanos), el pato laqueado (no hay nada comparado con el que tomas allí), los monjes budistas, volar cometas en Tianmen, …

Pero como cada domingo por la tarde había que volver a Tianjin, recuerdo la primera vuelta, sin móvil y sin pasaporte, me bajo a recepción y le digo a la chica de recepción: me pides un taxi para la estación de tren y me dice ¿para cual? No sé cómo no había caído en la posibilidad de que en una ciudad de 17,5 millones de habitantes cabría la posibilidad de que hubiera más de una estación; ese día volví en autobús. Recuerdo lo pequeñito que me sentí metido en un taxi al que le había dado las indicaciones otra persona y que me estaba llevando a dónde el considerara oportuno y con quien era imposible comunicarse, está claro que somos un punto en el universo, en eso momento absolutamente nadie sabía dónde estaba yo, ni tan siquiera yo mismo y no os voy a engañar da bastante vértigo.

Lo curioso fue al llegar a Tianjin, pensé en cuanto vea algo que me suene me bajo y después de dar mil vueltas por la ciudad, el autobús se para y se baja todo el mundo y yo pensé bueno un taxi y al hotel. Me acerco al primer taxi y le digo “Hyatt Hotel”, el tío me mira con cara de “pero a este que le pasa en la boca” y decido marcar más la pronunciación “jayat jotel”. Después de varios intentos el tío sale del taxi y empieza a llamar a compañeros; os podéis imaginar la escena: en una parada de taxis un tío de dos metros y seis o siete chinos de metro cincuenta, de foto. Era buenísimo, ahora me río en aquel momento casi me echo a llorar, venía mi taxista y me hacía un gesto como para que repitiera el nombre, yo decía jayat jotel de todas las formas que se me ocurría y entonces ellos hacían un circulo y se ponían a discutir y al rato venía uno y me hacía repetir. Así hasta que me acorde de que llevaba una factura del hotel en el traje (mira que me quejé de aquella reunión en la embajada un sábado, pero me salvo) y le enseño el papel y me dice: jayat jotel; casi lo mato; pero contra todo pronóstico esa noche dormí en el hotel.

De vuelta en Tianjin seguí con mi, llamemos sorprendente, ruta gastronómica os voy a contar cuatro detallitos para que se os haga la boca agua y os llene de envidia. Un día Teresa Li me pregunta si me gusta la fondue y yo dije que clara que sí tanto la de queso como la de carne; y me llevo a un restaurante coreano diciéndome que era muy parecido; lo mismito vamos, era un perolo de agua hirviendo y unas tiras de carne, que yo quiero pensar vacuno aunque tratándose de un coreano … y la gracia era coger la carne con los palillos, procurar que no se te escaldara la mano y luego echarle a la carne cocida una salsa de soja, lechuga y una hoja de hierbabuena, la clásica fondue que te puedes tomar en la ciudad viaja de Berna. No todo era así había unas brochetas de sepia con sésamo que tenían su puntito. Otro día Teresa que ya estaba desautorizadísima, me propuso ir a comer a un restaurante español. ¡¡¡Vaya tela!!! Lo dejaremos en curioseras, un montón de platos “españoles” y en medio de la comida unas tostadas de mantequilla y mermelada, la clásica comida de domingo en cualquier hogar de Castilla. Luego pensé que seguro que los chinos cuando vienen aquí a un restaurante idem pues …

Otro día fuimos a comer Langosta a uno de los mejores sitios, me dijeron que era cruda, yo ya no me asustaba por nada, eso pensé yo. Pues una vez más consiguieron sorprenderme, la pobre langosta que tenía su cuerpo picadito alrededor de ella todavía movía las antenas cuando llegó a la mesa y me explicaron que eso es lo que hace que un sitio sea bueno que la langosta mueva las antenas, como decían en El Diario de Bridget Jones: raza cruel.

Mi querido Riu Liu (al que yo en Madrid llevé al 5 J’s) me dijo que si me apetecía pato y ya os conté lo que me molaba, así que fuimos a uno de los sitios míticos y bueno ahí andamos con los clásicos mil platos de una comida china, su clásica sopa de mercurio incluida (es para verla yo me negué a probarla, es que era tal cual mercurio); en una de esas me acercan un plato con una salsa amarilla y digo yo a ver; ¡¡acojonante!! Llegué a echar de menos el pollo del segundo día. Y me pregunta ¿te gusta? Y yo, bueeeeeno; y me dice “pato” y yo “¿qué pato?”. Y entonces con toda la tranquilidad que le caracteriza me explica que son las membranas de las patas de un pato con mostaza; tócate los … mariloli. La textura, el sabor, … una alegría tras otra vamos.

No todo era disfrutar en la mesa algún que otro día nos fuimos de copas y os digo que fue increíble, primero estuvimos en un garito de copas muy al estilo de aquí, jugando a los dados y el que palmaba bebía; luego un discotecon con sus gogos y todo y a las tres y media o por ahí nos cambiamos de sitio, yo pensé que a otra discoteca, pero no fuimos al garito de los mundos. Una pasada era un edificio de varias plantas, entrabas y para una lado iban las chicas y al otro los tíos, pasabas a unas taquillas y dejabas la ropa para ir a un blaneario urbano de la leche con todo tipo de apechusques, me encantaban las tumbonas dentro de una piscina de burbujas en frente de una pantalla de cine, si hubiera entendido el chino ya me habría vuelto loco. Un poquito de sauna, un poco de nebulizada, … y sobre todo que allí estábamos todos desnudos y es muy bueno para el ego de un occidental; aún hay una inscripción mía “a Mr. Trípode con cariño”.

Después pasabas a otro cuarto donde te daban un pijamita de Ralph Lauren, como no podía ser de otra manera, y ya subías a otro piso donde te juntabas con las chicas y había barras para tomar copas, salas de cine, salas para dormir, billares, comida de todo tipo, masajes, … me pareció una virguería. Y lo más gracioso es que todos con nuestro pijamita por aquella ciudad del ocio en un solo edificio. A la mañana siguiente pasamos por el spa y a currar.

Vamos una experiencia en toda regla y no os voy a engañar a pesar de todas las coñitas estoy deseando volver y recomiendo a cualquiera que se lo plantee que se pase por allí y disfrute de la locura de cada cruce con todos los giros permitidos y mil bicis, aunque en Pekin ya queden menos.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Discurso de Steve Jobs en Stanford: ¡¡¡Imperdible!!!

Gracias.

Tengo el honor de estar hoy aquí con vosotros en vuestro comienzo en una de las mejores universidades del mundo. La verdad sea dicha, yo nunca me gradué. A decir verdad, esto es lo más cerca que jamás he estado de una graduación universitaria.

Hoy os quiero contar tres historias de mi vida. Nada especial. Sólo tres historias.

La primera historia versa sobre "conectar los puntos".

Dejé la Universidad de Reed tras los seis primeros meses, pero después seguí vagando por allí otros 18 meses, más o menos, antes de dejarlo del todo. Entonces, ¿por qué lo dejé? Comenzó antes de que yo naciera.

Mi madre biológica era una estudiante joven y soltera, y decidió darme en adopción. Ella tenía muy claro que quienes me adoptaran tendrían que ser titulados universitarios, de modo que todo se preparó para que fuese adoptado al nacer por un abogado y su mujer.

Solo que cuando yo nací decidieron en el último momento que lo que de verdad querían era una niña.

Así que mis padres, que estaban en lista de espera, recibieron una llamada a medianoche preguntando: “Tenemos un niño no esperado; ¿lo queréis?”

“Por supuesto”, dijeron ellos.

Mi madre biológica se enteró de que mi madre no tenía titulación universitaria, y que mi padre ni siquiera había terminado el bachillerato, así que se negó a firmar los documentos de adopción. Sólo cedió, meses más tarde, cuando mis padres prometieron que algún día yo iría a la universidad.

Y 17 años más tarde fui a la universidad. Pero de forma descuidada elegí una universidad que era casi tan cara como Stanford, y todos los ahorros de mis padres, de clase trabajadora, los estaba gastando en mi matrícula.

Después de seis meses, no le veía propósito alguno. No tenía idea de qué quería hacer con mi vida, y menos aún de cómo la universidad me iba a ayudar a averiguarlo.

Y me estaba gastando todos los ahorros que mis padres habían conseguido a lo largo de su vida. Así que decidí dejarlo, y confiar en que las cosas saldrían bien. En su momento me dio miedo, pero en retrospectiva fue una de las mejores decisiones que nunca haya tomado.

En el momento en que lo dejé, ya no fui más a las clases obligatorias que no me interesaban y comencé a meterme en las que parecían interesantes. No era idílico. No tenía dormitorio, así que dormía en el suelo de las habitaciones de mis amigos, devolvía botellas de Coca Cola por los 5 céntimos, el envase, para conseguir dinero para comer, y caminaba más de 10 Km los domingos por la noche para comer bien una vez por semana en el templo de los Hare Krishna. Me encantaba.

Y muchas cosas con las que me fui topando al seguir mi curiosidad e intuición resultaron no tener precio más adelante. Os daré un ejemplo.

En aquella época la Universidad de Reed ofrecía la que quizá fuese la mejor formación en caligrafía del país. En todas partes del campus, todos los póster, todas las etiquetas de todos los cajones, estaban bellamente caligrafiadas a mano.

Como ya no estaba matriculado y no tenía clases obligatorias, decidí atender al curso de caligrafía para aprender cómo se hacía.

Aprendí cosas sobre el serif y tipografías sans serif, sobre los espacios variables entre letras, sobre qué hace realmente grande a una gran tipografía.

Era sutilmente bello, histórica y artísticamente, de una forma que la ciencia no puede capturar, y lo encontré fascinante. Nada de esto tenía ni la más mínima esperanza de aplicación práctica en mi vida. Pero diez años más tarde, cuando estábamos diseñando el primer ordenador Macintosh, todo eso volvió a mí.

Y diseñamos el Mac con eso en su esencia. Fue el primer ordenador con tipografías bellas. Si nunca me hubiera dejado caer por aquél curso concreto en la universidad, el Mac jamás habría tenido múltiples tipografías, ni caracteres con espaciado proporcional. Y como Windows no hizo más que copiar el Mac, es probable que ningún ordenador personal los tuviera ahora. Si nunca hubiera decidido dejarlo, no habría entrado en esa clase de caligrafía y los ordenadores personales no tendrían la maravillosa tipografía que poseen.

Por supuesto, era imposible conectar los puntos mirando hacia el futuro cuando estaba en clase, pero fue muy, muy claro al mirar atrás diez años más tarde.

Lo diré otra vez: no puedes conectar los puntos hacia adelante, sólo puedes hacerlo hacia atrás. Así que tenéis que confiar en que los puntos se conectarán alguna vez en el futuro. Tienes que confiar en algo, tu instinto, el destino, la vida, el karma, lo que sea.

Esta forma de actuar nunca me ha dejado tirado, y ha marcado la diferencia en mi vida.

Mi segunda historia es sobre el amor y la pérdida.

Tuve suerte, supe pronto en mi vida qué era lo que más deseaba hacer. Woz y yo creamos Apple en la cochera de mis padres cuando tenía 20 años. Trabajamos mucho, y en diez años Apple creció de ser sólo nosotros dos a ser una compañía valorada en 2 mil millones de dólares y 4.000 empleados.

Hacía justo un año que habíamos lanzado nuestra mejor creación — el Macintosh — un año antes, y hacía poco que había cumplido los 30.

Y me despidieron. ¿Cómo te pueden echar de la empresa que tú has creado?

Bueno, mientras Apple crecía contratamos a alguien que yo creía muy capacitado para llevar la compañía junto a mí, y durante el primer año, más o menos, las cosas fueron bien. Pero luego nuestra perspectiva del futuro comenzó a ser distinta y finalmente nos apartamos completamente. Cuando eso pasó, nuestra Junta Directiva se puso de su parte.

Así que a los 30 estaba fuera. Y de forma muy notoria. Lo que había sido el centro de toda mi vida adulta se había ido y fue devastador.

Realmente no supe qué hacer durante algunos meses. Sentía que había dado de lado a la anterior generación de emprendedores, que había soltado el testigo en el momento en que me lo pasaban. Me reuní con David Packard [de HP] y Bob Noyce [Intel], e intenté disculparme por haberlo fastidiado tanto. Fue un fracaso muy notorio, e incluso pensé en huir del valle [Silicon Valley].

Pero algo comenzó a abrirse paso en mí, aún amaba lo que hacía. El resultado de los acontecimientos en Apple no había cambiado eso ni un ápice. Había sido rechazado, pero aún estaba enamorado. Así que decidí comenzar de nuevo.

No lo vi así entonces, pero resultó ser que el que me echaran de Apple fue lo mejor que jamás me pudo haber pasado.

Había cambiado el peso del éxito por la ligereza de ser de nuevo un principiante, menos seguro de las cosas. Me liberó para entrar en uno de los periodos más creativos de mi vida. Durante los siguientes cinco años, creé una empresa llamada NeXT, otra llamada Pixar, y me enamoré de una mujer asombrosa que se convertiría después en mi esposa.

Pixar llegó a crear el primer largometraje animado por ordenador, Toy Story, y es ahora el estudio de animación más exitoso del mundo. En un notable giro de los acontecimientos, Apple compró NeXT, yo regresé a Apple y la tecnología que desarrollamos en NeXT es el corazón del actual renacimiento de Apple. Y Laurene y yo tenemos una maravillosa familia.

Estoy bastante seguro de que nada de esto habría ocurrido si no me hubieran echado de Apple. Creo que fue una medicina horrible, pero supongo que el paciente la necesitaba. A veces, la vida te da en la cabeza con un ladrillo. No perdáis la fe. Estoy convencido de que la única cosa que me mantuvo en marcha fue mi amor por lo que hacía. Tenéis que encontrar qué es lo que amáis. Y esto vale tanto para vuestro trabajo como para vuestros amantes.

El trabajo va a llenar gran parte de vuestra vida, y la única forma de estar realmente satisfecho es hacer lo que consideréis un trabajo genial. Y la única forma de tener un trabajo genial es amar lo que hagáis. Si aún no lo habéis encontrado, seguid buscando.

No os conforméis.

Como en todo lo que tiene que ver con el corazón, lo sabréis cuando lo hayáis encontrado. Y como en todas las relaciones geniales, las cosas mejoran y mejoran según pasan los años. Así que seguid buscando hasta que lo encontréis.

No os conforméis.

Mi tercera historia es sobre la muerte.

Cuando tenía 17 años, leí una cita que decía algo como: “Si vives cada día como si fuera el último, algún día tendrás razón”. Me marcó, y desde entonces, durante los últimos 33 años, cada mañana me he mirado en el espejo y me he preguntado: “Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy a hacer hoy?” Y si la respuesta era “No” durante demasiados días seguidos, sabía que necesitaba cambiar algo.

Recordar que voy a morir pronto es la herramienta más importante que haya encontrado para ayudarme a tomar las grandes decisiones de mi vida.

Porque prácticamente todo, las expectativas de los demás, el orgullo, el miedo al ridículo o al fracaso se desvanece frente a la muerte, dejando sólo lo que es verdaderamente importante.

Recordar que vas a morir es la mejor forma que conozco de evitar la trampa de pensar que tienes algo que perder. Ya estás desnudo. No hay razón para no seguir tu corazón.

Hace casi un año me diagnosticaron cáncer. Me hicieron un chequeo a las 7:30 de la mañana, y mostraba claramente un tumor en el páncreas. Ni siquiera sabía qué era el páncreas. Los médicos me dijeron que era prácticamente seguro un tipo de cáncer incurable y que mi esperanza de vida sería de tres a seis meses. Mi médico me aconsejó que me fuese a casa y dejara zanjados mis asuntos, forma médica de decir: prepárate a morir.

Significa intentar decirle a tus hijos en unos pocos meses lo que ibas a decirles en diez años. Significa asegurarte de que todo queda atado y bien atado, para que sea tan fácil como sea posible para tu familia. Significa decir adiós.

Viví todo un día con ese diagnóstico. Luego, a última hora de la tarde, me hicieron una biopsia, metiéndome un endoscopio por la garganta, a través del estómago y el duodeno, pincharon el páncreas con una aguja para obtener algunas células del tumor. Yo estaba sedado, pero mi esposa, que estaba allí, me dijo que cuando vio las células al microscopio el médico comenzó a llorar porque resultó ser una forma muy rara de cáncer pancreático que se puede curar con cirugía.

Me operaron, y ahora estoy bien. Esto es lo más cerca que he estado de la muerte, y espero que sea lo más cerca que esté de ella durante algunas décadas más. Habiendo vivido esto, ahora os puedo decir esto con más certeza que cuando la muerte era un concepto útil, pero puramente intelectual:

Nadie quiere morir.

Ni siquiera la gente que quiere ir al cielo quiere morir para llegar allí. Y sin embargo la muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella. Y así tiene que ser, porque la Muerte es posiblemente el mejor invento de la Vida. Es el agente de cambio de la Vida. Retira lo viejo para hacer sitio a lo nuevo.

Ahora mismo lo nuevo sois vosotros, pero dentro de no demasiado tiempo, de forma gradual, os iréis convirtiendo en lo viejo, y seréis apartados. Siento ser tan dramático, pero es bastante cierto. Vuestro tiempo es limitado, así que no lo gastéis viviendo la vida de otro.

No os dejéis atrapar por el dogma que es vivir según los resultados del pensamiento de otros.

No dejéis que el ruido de las opiniones de los demás ahogue vuestra propia voz interior.

Y lo más importante, tened el coraje de seguir a vuestro corazón y vuestra intuición.

De algún modo ellos ya saben lo que tú realmente quieres ser. Todo lo demás es secundario.

Cuando era joven, había una publicación asombrosa llamada The Whole Earth Catalog [Catálogo de toda la Tierra], una de las biblias de mi generación. La creó un tipo llamado Stewart Brand no lejos de aquí, en Menlo Park y la trajo a la vida con su toque poético. Eran los últimos años 60, antes de los ordenadores personales y la autoedición, así que se hacía con máquinas de escribir, tijeras, y cámaras Polaroid. Era como Google con tapas de cartulina, 35 años de que llegara Google, era idealista, y rebosaba de herramientas claras y grandes conceptos. Stewart y su equipo sacaron varios números del The Whole Earth Catalog, y cuando llegó su momento, sacaron un último número.

Fue a mediados de los 70, y yo tenía vuestra edad.

En la contraportada de su último número había una fotografía de una carretera por el campo a primera hora de la mañana, la clase de carretera en la que podrías encontrarte haciendo autoestop si sois aventureros. Bajo ella estaban las palabras:

“Sigue hambriento. Sigue alocado”.

Era su último mensaje de despedida. Sigue hambriento. Sigue alocado.

Y siempre he deseado eso para mí. Y ahora, cuando os graduáis para comenzar de nuevo, os deseo eso a vosotros.

Seguid hambrientos. Seguid alocados.

lunes, 7 de septiembre de 2009

Caracoles Sanchopanza

El sábado tuvimos comida y volvimos a La Marañosa, mola cocinar en el campo; este mes hicimos un arrocito y unos caracoles que quedaron de coña así que vamos a transcribir esos caracoles.

Lo primero es hacer un buen fondo de cebolla picada y pocharla bastante, no basta con dejarla transparente hay que seguir un poco más y entonces echar chorizo, jamón y panceta ahumada bien picado y en cantidades industriales. Lo salteamos todo bien para que se vayan mezclando lo sabores y añadimos pimentón picante y dulce a partes iguales, un par de vueltas y añadimos un buen chorreón de vino tinto para que no se queme el pimentón. Una vez evaporado el alcohol se añade al guiso una fritada de tomate y pimiento (o se compra hecha o se hace un sofrito de tomate y pimiento y se pasa por la batidora) y se deja unos cinco minutos removiendo para mezclarlo bien. Por último se añaden los caracoles, se lleva a ebullición, un par de vueltas y se baja el fuego al mínimo y se tiene entre 30 y 40 minutos, contorlando la textura de la salsa por si hiciera falta más tiempo.

Nos salió de vicio para los amigos de los caracoles un plato exquisito solo para paladares educados.

jueves, 20 de agosto de 2009

Ayuda

Un hombre intentaba mover una roca que había en la mitad del camino, obstruyendo el paso; empujando, usando una rama a modos de palanca,.., y después de intentarlo todo, comprobó que la piedra no se había movido ni un centímetro.

Su padre que lo observaba le gritó:

-Utiliza todas tus fuerzas.

A lo que respondió fatigado el hijo:

- ¿Acaso no ves que lo he intentado todo?, ya no puedo más.

El otro hombre le volvió a gritar:

-No has utilizado aún todas tus fuerzas.

- No le entiendo, padre.

Respondió el hijo, algo enfadado,pero tranquilamente el padre le dijo;

-”NO, TODAVÍA NO ME HAS PEDIDO AYUDA”

lunes, 10 de agosto de 2009

Entrantes

Ensalada de pollo con reducción de aceto balsámico: picamos tomate y le añadimos ajo, perejil y cebolla muy picaditos y lo sazonamos con sal gorda y orégano, un buen chorreón de hojiblanca y reservamos para que se mezclen los sabores. Salteamos un poco de panceta ahumada para que se ponga crujiente y añadimos daditos de pollo, lo hacemos bien, echamos un poco de aceto, dejamos que reduzca y lo añadimos todo al tomate y volvemos a remover. Picamos unas aceitunas negras, unos espárragos y una buena cantidad de lechuga, yo usé Batavia pero considero que puede valer casi cualquiera, una muy amarga no le irá bien pero quitando eso.

Bloody Mary con gelatina de berberechos, preparamos un bloody mary con su zumo de tomate, su vodka, su sal y su pimienta. Por otro lado abrimos unos berberechos al vapor; los sacamos de la concha y los disponemos en una bandeja. Colamos el agua de los berberechos y disolvemos unas laminas de gelatina, cubrimos los berberechos y a la nevera. Cortamos la gelatina en cubitos, como si fueran los hilos del bloody mary, se puede decorar con unos germinados.

Ajo blanco con caviar: se sirve en vasito de chupito para tomarlo todo de una vez y que las bolitas exploten en la boca haciendo un efecto increíble. Primero se prepara el ajo blanco, ya sabéis: leche, almendras, ajo, aceite y vinagre; preparamos un aceite de rucula, el toque cito amargo y emplatamos: ajo blanco, un golpe de aceite y las bolitas de caviar que se sumerjan.

Brandada de bacalao con confitura de tomate, otra receta del gran Rodrigo de la Calle, hacemos una brandada de bacalao, pero confitando en aceite no con agua. Emulsionamos el bacalao la patata y el ajo con el aceite del confitado. Hacemos el tomate con el azúcar y lo disponemos en la base de un vaso de chupito, luego la brandada y coronamos con picatostes de pan frito.

Minitortillas de arroz, de nuestro admirado Juan Pozuelo; si os ha sobrado paella o arroz con lo que sea, se baten unos huevos y se mezcla arroz. Calentamos una sarten y echamos una gota de aceite y con una cuchara cogemos la mezcla y a la sarten a fuego vivo.

jueves, 6 de agosto de 2009

Onda Verde

El otro día estábamos hablando de las cosas curiosas que habíamos hecho a lo largo de nuestra vida y yo hable de nuestro programa de radio, Onda Verde en Radio Torrelodones, los viernes de 20:00 a 22:00; no lo busquéis que os estoy hablando de los años 92 al 94; y mis contertulios se quedaron bastante flipaillos así que me he decidido a hacerle un pequeño homenaje a aquel gran programa.

El programa empezó en el 91 con Vicente (Vassen), Rubén (Salem) y Javi, sin mote al menos que yo recuerde; hablábamos de ello en el recreo del insti y a mí la verdad es que me molaba muchísimo el tema, y empecé a ayudarles con las encuestas aquellas que hacían de manera rudimentaria apretando play y rec en el walkman, aún recuerdo la de “¿sabes lo que es el Silmalirion?” y aquellas respuestas tan ingeniosas antes de que todo el mundo fuese friki.

Poco a poco me fui metiendo en el tema y al final hacía mi propia sección en la que yo era un reportero desplazado al lugar de la noticia de la semana y la comentaba un poquillo, incluso durante un tiempo haciendo la voz de Hermida, fue genial, practicamente improvisabamos todo y por aquellos micros pasamos casi todos los de clase, en aquel entonces inseparables: David, Luis, Antonio, Ana, Juan Marcos, Julio (que no era de clase, pero era el hermano de uno de los creadores, así que ...), ...

Recuerdo que nos llamaba una chica desde el Barrio del Pilar de Madrid, algo que nos sorprendía mucho porque apenas se podía oír en Galapagar, diciendo que ella no llamaba para las entradas del cine que regalábamos, sino para hablar con nosotros que teníamos unas voces muy bonitas y parecíamos muy simpáticos; ya veis teníamos hasta fans. Estuve un tiempecillo sancionado por una fuerte discusión que tuve en con Javi durante la música, pero Rubén abrió los micros y bueno se nos oyó decir cosas … pero bueno aquello pasó y volví a recuperar mi microfono.

Un bonito recuerdo y una experiencia muy chula ¡qué estamos hablando de un programa de radio! para empezar ha servido para que hablar en público no supongo un esfuerzo especial, y que hace que viva enganchado a ese medio tan increible.

martes, 28 de julio de 2009

En el hotel

Este es un ejemplo de cómo afrontar una situación y cómo de una gran pérdida tratar de sacar un pequeño beneficio, y lo más importante nunca perder los nervios; como ya os dije en otra entrada: el que se calienta pierde.

Cuando llegué al hotel no encontré sitio fácil para aparcar y en la segunda vuelta apareció un sitio en el lateral del mismo, muy cerca de la entrada; así que yo tan contento, pero la verdad es que no estaba yo seguro de la legalidad, así que pregunté en recepción y me dijeron que me quedará tranquilo que no pasaba nada; así que allí lo dejé.

A la mañana siguiente había un montón de policía por allí y me dijeron que había un mitin del presidente para la campaña electoral, así que tampoco me preocupe demasiado y me fui a mis quehaceres.

Pero cuando volví al hotel a última hora de la tarde a recoger mi maleta y volverme a casa, mi coche no estaba, es más no había ninguno de los que estaban aparcados en la acera junto al mío, pregunté en recepción y me dijeron que esa mañana había estado la grúa y que se los había llevado todos, por el tema del mitin, pero que no iban a multarlos que solo era por cuestión de seguridad, así que me cogí un taxi y me fui al depósito municipal, dónde me cascaron una multa de padre y muy señor mío, la pague religiosamente y cogí mi coche para volver a casa.

Pero cuando estaba viajando iba dándole vueltas a la cabeza, así que decidí llamar al hotel y reclamar el importe de la multa, me dijeron que el director no estaba y que les dejara el teléfono y que él me llamaría. La verdad es que pensé, este me va a llamar cuando las ranas críen pelo, pero que le vamos a hacer. Me equivocaba, el señor me llamó a los 45 minutos, disculpándose por haber tardado en llamarme y diciéndome que le habían pasado mi reclamación, que la había estudiado y que consideraba que no era responsabilidad del hotel, yo le dije que si consideraba que era responsabilidad del hotel, por cuanto que había aparcado a instancias de sus empleados; pero bueno que ni iba a dejar de ir al hotel, ya que estaba enfrente del curro, ni mucho menos iba a demandarles por el importe de una multa, que me parecía ridículo.

Cuando volví al hotel a los 15 días, pedí hablar con el director, explicando que era de la grúa y demás; y me recibió muy amablemente y le dije que quería verle porque a pesar de no compartir su punto de vista quería felicitarle por haber llevado el asunto tan elegantemente, él me agradeció mi actitud y el halaga y me contó que había una señora que le pasó lo mismo que a mí y que fue a reclamar al hotel, sin haber preguntado, ni tan siquiera ser clienta y que lo había hecho con unas formas que la habían declarado persona non grata.

Desde entonces siempre tengo habitación en ese hotel, aunque sea imposible conseguir habitación, yo tengo la mía, por lo general una minisuite, y de vez en cuando un repasillo por el spa que suele dejarme nuevo. En conclusión tanto la señora en cuestión como yo pagamos religiosamente nuestra multa, pero … reflexionad sobre ello.

jueves, 25 de junio de 2009

Pollo a la cazadora

Una recetilla en plan Jamie que me encontré por internete y la verdad es que salió buena, al punto que mi hermano que todo lo critica la repitió, con éxito de crítica y público.

Usaremos cuartos traseros que vamos a adobar con sal, ajo, romero y perejil, bien repartidos por toda la superficie, los colocamos en una fuente y le echamos un buen chorreón de aceite y cubrimos con vino tinto y echamos unas hojas de laurel. Los tapamos y lo dejamos reposar un par de horas.

En una olla que pueda ir al horno dorar unos dientes de ajo y cuando se doren, disolver unas anchoas en el aceite caliente y una vez disueltas añadir un poco de cebolla picada y cuando se ponga transparente añadir unas aceitunas negras y bajar el fuego al mínimo.

Enharinar el pollo, freírlo y añadir a la olla, una vez añadidas todas las piezas de pollo subimos el fuego y añadimos el vino de la maceración y cuando haya evaporado el alcohol añadimos tomate triturado, un bote grande para 4 piezas. Una vez que haya roto a hervir otra vez lo metemos tapado en el horno, que estará precalentado a 180º una hora; se destapa y se deja otros 15 minutos y a disfrutar acompañado de arroz.

martes, 16 de junio de 2009

Dorada al horno

El otro día en la sociedad nos dio por pegarle duro al pescado y nos propusimos una doradita, la verdad es que quedo de coña y bien fácil de hacer.

Cubrimos una bandeja de horno de cebolla cortada en rodajas con un poco de sal, pimienta y aceite, y al horno a 180º. Luego en una sartén con un poco de aceite salteamos unas patatas cortadas en laminas con unos ajos y tomillo, cuando han cogido algo de color se disponen en la bandeja de la cebolla y encima colocamos las doradas con un buen chorreón de vino blanco para que no se sequen, las del otro día tenían unas dimensiones considerables así que las tuvimos 45’.

Unos cinco minutos antes de sacarlas les echamos un por encima un refrito de ajos, perejil y vinagre.

jueves, 11 de junio de 2009

Argentinos

Me llegó un mail con unas reflexiones sobre ese pueblo al que tanto quiero y echo de menos ahora que llevo un tiempo sin ir.

Una vez alguien le pidió a un filósofo español, Julián Marías, muy conocedor del pueblo argentino y de sus costumbres y, con un gran cariño por nosotros, que hablara de los argentinos, pero con visión desde fuera del bosque y de toda pasión... Esto fue lo que dijo:

'Los argentinos están entre vosotros, pero no son como vosotros. No intentéis conocerlos, porque su alma vive en el mundo impenetrable de la dualidad. Los argentinos beben en una misma copa la alegría y la amargura. Hacen música de su llanto -el tango- y se ríen de la música de otro; toman en serio los chistes y de todo lo serio hacen bromas. Ellos mismos no se conocen.
Creen en la interpretación de los sueños, en Freud y el horóscopo chino, visitan al médico y también al curandero todo al mismo tiempo.

Tratan a Dios como 'El Barba' y se mofan de los ritos religiosos, aunque los presidentes no se pierden un Tedeum en la Catedral. No renuncian a sus ilusiones ni aprenden de sus desilusiones.
No discutáis con ellos jamás!!! Los argentinos nacen con sabiduría!!! Saben y opinan de todo!!! En una mesa de café y en programas de periodistas / políticos arreglan todo.

Cuando los argentinos viajan, todo lo compara con Buenos Aires. Hermanos, ellos son 'El Pueblo Elegido'... por ellos mismos. Individualmente, se caracterizan por su simpatía y su inteligencia. En grupo son insoportables por su griterío y apasionamiento. Cada uno es un genio y los genios no se llevan bien entre ellos; por eso es fácil reunirlos, pero unirlos.... imposible.

Un argentino es capaz de lograr todo en el mundo, menos el aplauso de otros argentinos. No le habléis de lógica. La lógica implica razonamiento y mesura. Los argentinos son hiperbólicos y desmesurados, van de un extremo a otro con sus opiniones y sus acciones. Cuando discuten no dicen 'no estoy de acuerdo', sino 'Usted está absolutamente equivocado'.

Aman tanto la contradicción que llaman 'Bárbara' a una mujer linda; a un erudito lo bautizan 'Bestia', a un mero futbolista 'Genio' y cuando manifiestan extrema amistad te califican de 'Boludo'. Y si el afecto y confianza es mucho más grande, 'Eres un Hijo de Puta'. Cuando alguien les pide un favor no dicen simplemente 'Si', sino 'Como No'. Son el único pueblo del mundo que comienza sus frases con la palabra 'NO'. Cuando alguien les agradece, dicen: 'NO, de nada' o 'NO'... con una sonrisa.

Los argentinos tienen dos problemas para cada solución. Pero intuyen las soluciones a todo problema. Cualquier argentino dirá que sabe cómo se debe pagar la deuda externa, enderezar a los militares, aconsejar al resto de América latina, disminuir el hambre de África y enseñar economía en USA.

Los argentinos tienen metáforas para referirse a lo común con palabras extrañas. Por ejemplo, a un aumento de sueldos le llaman... 'Rebalanceo de Ingresos', a un incremento de impuestos, 'Modificación de la Base Imponible ' y a una simple devaluación, 'Una Variación Brusca del Tipo de Cambio'. Un Plan Económico es siempre, 'Un Plan de Ajuste' y a una Operación Financiera de Especulación la denominan, 'Bicicleta'.

Viven, como dijo Ortega y Gasset, una permanente disociación entre la imagen que tienen de sí mismos y la realidad. Tienen un altísimo número de psicólogos y psiquiatras y se ufanan de estar siempre al tanto de la última terapia. Tienen un tremendo súper ego, pero no se lo mencionen porque se desestabilizan y entran en crisis. Tienen un espantoso temor al ridículo, pero se describen a si mismo como liberados. Son prejuiciosos, pero creen ser amplios, generosos y tolerantes.

LOS ARGENTINOS SON ITALIANOS QUE HABLAN EN ESPAÑOL, PRETENDEN SUELDOS NORTEAMERICANOS Y VIVIR COMO INGLESES, TRABAJANDO COMO JAMAICANOS. DICEN DISCURSOS DE FRANCESES Y VOTAN COMO VENEZOLANOS, PIENSAN COMO ZURDOS Y VIVEN COMO BURGUESES, ALABAN EL EMPRENDIMIENTO CANADIENSE Y TIENEN UNA ORGANIZACIÓN BOLIVIANA, ADMIRAN EL ORDEN SUIZO Y PRACTICAN UN DESORDEN TUNECINO.

martes, 9 de junio de 2009

Risotto neri de calamres y espinacas

Esta receta surgió básicamente de una despensa vacía y al final con un poco de imaginación salió una receta bien apañá.

Picamos bien la cebolla y la pochamos en una buena cantidad de aceite, cuando esté transparente añadimos las espinacas y lo rehogamos bien, cuando esté bien mezclado añadimos el calamar cortado en anillas (yo lo prefiero así, hacedlo como queráis) y subimos el fuego para que se dore el calamar. Cuando esté dorado bajamos el fuego y añadimos el arroz, le damos un par de vueltas y añadimos dos cazos de caldo (yo usé uno de gambas) y removemos, cuando se lo haya chupado, añadir otro par de cazos sin parar de remover; e id añadiendo cazos hasta que el arroz esté en su punto, cuando creáis que os quedan un par de cazos por añadir echad la tinta. Una vez que el arroz este en su punto añadid parmesano y mezclarlo todo bien, os quedará una consistencia similar a la del arroz con leche (el bueno el que hacían en los valles más recónditos de Asturias).

Y a pasarlo bien, es bastante sencillo aunque algo laborioso y suele impresionar bastante, así que ¡¡a fardar!!

martes, 26 de mayo de 2009

Ternera con cebolla y pimiento Hispano-China

Buenas queridos, pues sí el otro día tenía antojo de chino y se nos ocurrió tratar de hacer una ternera con cebolla como la hacen en los chinos y salió una cosa bastane curiosa, la verdad.

Primero cortamos la cebolla en rodajas y a la sartén con un poco de aceite de oliva a fuego vivo, cuando este blanda añadimos el pimiento cortado en tiras y le damos unas cuantas vueltas, cuando este mezcladillo echamos los filetes de ternera tambien cortados en tiras; algo más estrechas que las del pimiento para que quede bien, ya que el pimiento va a reducir. Cuando veamos que la carne empieza a estar le añadimos un buen chorro de salsa de soja, como 4 ó 5 cucharadas y seguimos moviendo.

En un recipiente echamos 3ó 4 cuharadas de salsa de soja, media de harina, un buen chorro de vino tinto y agua; lo batimos todo hasta que no queden grumos de harina (tambien podemos colarlo cuando nos cansemos de mezclar) y lo echamos a la sarten; seguimos moviendo todo bien para que no se pegue y cuando haya reducido a la mitad o menos podemos retirarlo del fuego.

Yo utilicé arroz blanco de guarnición y la verdad es que le iba muy bien, ale a disfruitarlo.

martes, 12 de mayo de 2009

Se nos fue Antonio

Sí, se nos fue Antonio...

Sin duda el poeta de los susurros, la voz más sensible y la mirada más huidiza de aquel que, como nadie, manejaba el lenguaje de los sentimientos.

Su fragilidad ha sido su bandera y su creatividad en el manejo de las cuerdas y las letras nos han permitido "viajar" en infinidad de ocasiones sin necesidad de movernos... A veces es posible ser el más grande haciéndose el más pequeño.

El supo como nadie definir tantos momentos, que ahora mismo todos esos recuerdos se agolpan en mi cabeza y no puedo por menos que darle las gracias y hacer este pequeño homenaje con la colaboración inestimable de Gelo que con su sensibilidad sabía comprenderle mejor que nadie.

Su música que todavía hoy, un día cualquiera, no sabemos qué hora es, pero se acuesta a nuestro lado sin saber por qué....

miércoles, 6 de mayo de 2009

Ana

Parece mentira que en tan solo tres letras se concentren tantísimas historias y es que es un nombre que está unido a mi vida sin remedio, mi primer beso en condiciones, el último gran amor platónico, mi hermanita pequeña, mi mejor amiga, … obviamente no todo se refiere a la misma persona, aunque alguna personilla cumple más de una. Y eso me ha llevado a dedicar unas líneas a este nombre que tanto ha significado y a día de hoy sigue significando en mi vida y todo sin hacer nada de ruido.

Os quiero agradecer a todas lo que habéis hecho por mí, aportando cada una su granito de arena; desde ese beso el 26 de Julio hasta escuchar mis movidas en los días más oscuros; mi vida sin lugar a dudas no sería la misma. Es que hasta la primera vez que me emocioné al ver un bebe fue aquel día de S. Jorge del comienzo de “La Década”.

Mi historia con las tres letras es como la de un saltamontes que va pegando botes de una situación de a otra, de una sensación a otra; he de reconocer que no todo ha sido un camino de rosas cada vez que Ana aparecía en mi vida, probablemente la persona que más sentimientos negativos ha arrancado de mi también lleva este nombre, así que se trata quizá de una montaña rusa de emociones, o quizá solo sea la excepción para confirmarme la suerte que tengo de poder contar con ellas.

En cualquier caso Eienei suena tan curioso que es una pena no disfrutarlas, por suerte sigo rodeado de ellas, se comportan como unas amigas increíbles de las que no fallan, vamos las mejores que uno puede tener; especialmente a vosotras, pero también a las que ya no tengo cerca y a las que me quedan por conocer, un beso enorme.

lunes, 4 de mayo de 2009

Una cancioncilla

Siempre que cantes recuerda esta canción, que sea siempre un canto de unión; por eso debes aprender a vivir, debes comprender que la vida es servir y solo así serás muy feliz: haciendo sonreír.

La vida dura es y no podrás triunfar al empezar, te hará caer y te hará perder, pero entonces surgirá una nueva esperanza que te ayudará a encontrar algo por lo que vivir, algo por lo que luchar; lo que sea oscuro claro lo verás, lo que sea imposible tu lo alcanzarás; no digas nunca que no puedes más tienes que luchar, luchar y triunfar.

Debes aprender que la vida es servir y solo así serás muy feliz haciendo sonreír, por eso cuando tu vida acaba de empezar todos sonreían al verte llorar, que el amor sea el centro de tu vivir y cuando vayas a morir, que todos lloren y que tú puedas sonreír.

lunes, 20 de abril de 2009

La Confirmación

Teníamos el mejor grupo e incluso el monitor más salao don Antonio Sierra Sidera; pues aunque estábamos en la cima y éramos puestos como ejemplo, unos días después nos dividiríamos y unos nos iríamos a CEMI y otros a Frater, pero en el momento de la confir éramos un grupo compacto y desde Zarazalejo no habíamos hecho más que crecer como personas en una época tan difícil como la adolescencia, yo además había tenido que sobrevivir al hecho de trasladarme a la sierra y abandonar mi cole, mi barrio, mi …

Era una mañana soleada y yo con ese traje gris Príncipe de Gales que tanto me gustaba, combinado con camisa rosa (ese color que tanto me persigue) y corbata roja, noventero pero no muy extravagante. Hacía nueve años que no era el prota de una ceremonia religiosa, y pasarían 15 hasta la siguiente (aunque en esa prota, lo que se dice protagonista, no).

Yo ya vivía en la sierra y la verdad volver al cole siempre me ilusionaba y más para hacer algo con mi grupo, habíamos pasado muchas cosas juntos, desde 1º de BUP intercambiando opiniones todos los sábados, habíamos sobrevivido a cinco monitores y un espontaneo, a convivencias de todo tipo, a corrección fraternas, a ...

La ceremonia fue un sábado a las doce y mi padre era mi padrino; recuerdo que andábamos con muchas coñas con la torta que te daba el Vicario, y al final no, solo óleo y poco más. Vinieron mis abuelos, pero aquello fue una celebración más bien íntima, y la verdad es que en aquel entonces tampoco quería más, quizá en lo que pensaba era en salir por la noche con todos mis amigos. Esas edades en las que tu orden de prioridades es así.

Lo cierto es que la noche fue una pasada, empezamos en Bilbao jugando al penúltimo y yo ya salí de la Casa de la Cerveza en todo lo mío y luego fuimos a Malasaña (de las poquitas veces en mi vida que he ido por ahí); acabé durmiendo en casa de Armada y fue un día increíble, pero el último gran día de un grupo que marcó mi primera adolescencia. A pesar de que ya llevaba un año en la sierra y estaba notablemente cambiado, recuerdo que un escalofrío me recorrió la espalada cuando estaba preparándome para bajar a Madrid con los chavales.

martes, 14 de abril de 2009

Patatas con berberechos

Una recetilla muy sencillita que puede servir de aperitivo o de guarnición; vamos allá lo primero de todo es laminar unos ajitos y dorarlos en un buen aceite de oliva, cuando empiecen a dorarse echamos unas anchoas y removemos hasta que se disuelvan. En esta mezcla triscamos unas patatas y les damos unas vueltecillas para que se doren un poco y cubrimos con caldo de pescado, vino blanco y el agua de unos berberechos, dejamos cocer a fuego lento hasta que las patatas estén bien cocidas y el caldo haya reducido hasta la mitad. Para servir añadimos los berberechos y removemos un poco para mezclarlos bien y servimos.

martes, 24 de marzo de 2009

Ensaladas 2

Rúcula: desmenuzamos queso de cabra en el fondo del recipiente (tiene que ser uno con sabor, sino usad rulo), zanahoria rallada, la rúcula, jamón de york cortado en dados pequeños, huevos de codorniz duros y aderezamos con poca sal, aceto y aceite de arbequina.

Templada de repollo con sabor oriental: dorar unos ajos laminados y un trocito de cayena en aceite de girasol (o de palma si tenéis), añadir unas gambas y una vez estén hechas las retiramos y echamos el repollo, lo salteamos hasta que este blandito, por otro lado tostamos unas almendras en una sartén con una gota de aceite de oliva. Añadir las gambas y las almendras al wok donde está el repollo y darle un par de vueltas para mezclarlo todo y templar las gambas. Retirar y aderezar con medio limón exprimido y soja. Para darle colorido se puede añadir lombarda y zanahoria. Excelente receta de Pat.

De salmón aliñada con salsa de mostaza y miel: cortar en trozos unos tomates y sazonarlos con sal gorda, eneldo y hojiblanca; reservar para que el tomate vaya soltando su agua. Preparad la salsa a base de mostaza, miel, soja y aceite, batid bien para obtener una salsa homogénea. En el cuenco de los tomates añadid las lechugas (yo usé romana, escarola, lombarda y canónigos), nueces y la salsa, mezclar todo bien y disponerlo sobre una bandeja. Para presentarlo cubrirlo de salmón ahumado.

Garbanzos cocidos con tomate, cebolla y atún o pulpo; bien aliñaditos con aceite y vinagre, sal y pimienta. Mi madre lo hace con pulpo y Pat con atún, cualquiera de las dos opciones son realmente buenas.

De pasta: se trocea el tomate y se aliña con ajo, perejil, orégano, arbequina, vinagre al ajo y sal gorda y se tapa para que vaya macerándose mientras preparamos el resto de los ingredientes. Cocemos unas espirales multicolores que le darán vistosidad a la ensalada. Tostamos unas tiras de bacón secándolas bien. En el recipiente de los tomates echamos lechuga troceada, la pasta y el bacón; mezclamos todo bien y servimos.

martes, 17 de marzo de 2009

Uno de estos días o una ocasión especial

Mi amigo abrió el cajón de la mesita de noche de su mujer y sacó un paquetito envuelto en un papel blanco. Éste, dijo, no es un simple paquete, es ropa interior, “lo compró la primera vez que fuimos a New York, hace 8 ó 9 años... y nunca lo usó. Lo guardaba para una ocasión especial, bien, creo que ésta es la ocasión adecuada”.

Se acercó a la cama y apoyó el conjunto al lado de la ropa que llevaría a la funeraria; su mujer acababa de morir.

Se giró hacia mí y me dijo: “nunca guardes nada para una ocasión especial, cada día que vives es una ocasión especial”.

jueves, 12 de marzo de 2009

L.A.

Bueno un par de adaptaciones, una escrita por mi y mi hermano Gonzalo en el lejano 92 y otra que me dedicaron de dos grandes canciones, una del siglo XX y otra del XIX; relacionados con mi grupo de la playa, algún día me decidiré a escribir algunas de las miles de historias que hemos disfrutado en la Costa Calida, definida muchas veces como la peor playa del mundo con la mejor gente del mundo. Disfrútnelas.


TBO Solitario

Siempre quise ir a LA,
dejar un día la urbanización
cruzar Castilla en autocar.
Pero ya hace tiempo que me han castigado,
y probablemente no se han olvidado.
No sé que verano pasare yo aquí.
Y ahora estoy aquí sentado
para Septiembre me han quedado
no sé si aprobaré, allá lejos, libertad.
Hace un momento que me he acordado
de mis dos primos los colgados
y la ultima rubia que se enrollaron
tres años atrás.
Quizás el Martini me ha hecho recordar
José porque no volviste a escribir
creí que podría olvidaros sin más
y aun a ratos ya ves.
Y al acabarse mi rubia me he sentido extraño
me he quedado solo fumando un cigarro
quizás he sentido nostalgia de vos.
Y desde esta cama donde estoy tumbado
me he sorprendido mirando una carta
me han atrapado nostalgias del mar.
El amanecer me sorprenderá
dormido borracho en Galapagar
bajo la escalera triste y solitario
y dice la gente que todo es normal
y yo aquí borracho en Galapagar
bajo la escalera triste y solitario
y no iré ¡¡¡CAPI!!!
Y no iré (bis), ¡OH! Peña, peña, peña y no iré


El Capitán Camilo

Con diez maletas por banda
Pasta en mano a toda vela
No corta el mar sino vuela
Un avión desde Madrid
Bajel pirata que llaman
Por su bravura el Camilo
En todo L.A. conocido
De uno al otro confín
La luna el mar riela
En la lona gime el viento
Y alza en blando movimiento
Vasos de Whisky y de Ron
Y va el capitán Camilo
Cantando alegre en la playa
Los Narejos a un lado, al otro Carmolí
Y allá enfrente la Perdiguera
Bebe amigo mío
sin temor
Que ni enemigo ha habido
En el alcohol ni en la borrachera
Tu rumbo a torcer alcanza
Ni a sujetarte cuando danzas
Veinte copas
hemos tomado
a despecho de la Boya
y han rendido
sin perdones
cien tapones
a tus pies
Que es mi vaso mi tesoro
Que es mi alcohol mi libertad
Mi ley, la barra y el vidrio
Mi única patria LA
En Madrid mueran feroz guerra
ciegos reyes
Por un palmo más de tierra
Que yo tengo aquí por mío
Cuanto abarca LA y el mar bravío
A quien nadie impuso leyes
Y no hay playa
sea cualquiera
ni vasca
tan mejor
que no sienta
ningún anhelo
cuando se marcha
tu avión
Que es mi vaso mi tesoro
Que es mi alcohol mi libertad
Mi ley, la barra y el vidrio
Mi única patria LA

martes, 3 de marzo de 2009

Tallarines con salmón

En el fondo de una olla ancha calentar un poco de aceite y cuando esté caliente echar agua de haber cocido gambas o langostinos. Cuando esté hirviendo echar los tallarines frescos y dejar que se cuezan a fuego medio para que absorban el sabor del caldo. En un mortero echad sal gorda y eneldo, machacarlo bien hasta que esté mezclado y luego añadid un yogurt y aceite, batimos bien la mezcla, hasta obtener una salsa homogénea. Servimos los tallarines formando nidos y los regamos con un poco del caldo en el que los hemos hervido, napamos con la salsa (esto es de cocinero flipao, simplemente echad salsa por encima). Por último decoramos con salmón ahumado cortado en tiras.

Sencillote y efectivo.

jueves, 26 de febrero de 2009

Profes III BUP-COU

Bueno mi tercera y última entrega porque aunque en la uni he tenido buenos profesores no me veo con ganas de hacer el bestiario; en fin BUP que gran época, por fin llegaron las chicas, aunque había pocas y no nos engañemos estábamos un poco decepcionados al principio, el tema es que ¡teníamos chicas en clase!, aún me vienen a la cabeza nombres como Ana Izquierdo, Beatriz Ontañón, Bárbara Goyanes,, … chicas que me parecían imposibles y desde luego para mí lo fueron, pero que me hablaban y me caían genial, porque la verdad me parecía increíble llevarme bien con esas diosas, ¡cómo es la adolescencia! Aunque en realidad uno estaba enamorado de otra. Luego en COU me fui a vivir a la sierra y cambié el Pilar por el instituto de Torrelodones; hecho que me hizo ferviente defensor de la enseñanza privada, pero que me convirtió en algo parecido al personaje que soy hoy; deje de ser un niño bueno y bobalicón para convertirme en un cherif. La verdad es que no recuerdo el nombre de ninguno de los profes de COU, recuerdo al Piños el de mates con el que tuve muchísimas diferencias especialmente el desde el día que rió de mi Roc Neige rosa y yo le dije que había que tener valor para reírse de algo que con su sueldo de maestro nunca se podría permitir y mientras la clase se reía a mi me quedaban las mates para septiembre. También me acuerdo de la profe de lengua la única que me entendía y su notable al final, el de filosofía un apátrida con el que tenía mis más y mis menos y las clases de dibujo en las que monté un campeonato de baseball con una regla de madera de un metro que había por el aula de dibujo, la profe de Química que pasaba de todo, de los alumnos, de la asignatura, de... Resulta curioso que a los profes de EGB los recuerde con claridad meridiana sin embargo con los de BUP tengo ciertas lagunas, quizá porque sean más, pero vamos a intentarlo.

· Emilio: primer profe al que no tratamos de don y que además de nuestro tutor daba mates en 1º e informática en 2º, un tipo genial de esos que si no existieran habría que inventarlos. Con él empecé a disfrutar de la estadística y aprendí a usar un ordenador de verdad y a no tenerle miedo.

· Mercedes: biología de primero, recuerdo aquel peinado que tenía con el que tantos motes se ganó, su asignatura era un coñazo de tomo y lomo y encima de las de aprender de memoria, pero bueno aprendimos palabras como platelmintos.

· Lola: la profe de inglés o como conseguir que una clase llegue a la anarquía total sin preocuparse lo más mínimo, estuvo muy bien Emilio avisándonos de que se solía vengar en el examen final y aún mejor Morales, Santi y Tejedor, con mi pequeña colaboración de distracción, mangando el examen, que el mismo Tejedor me dicto por teléfono, a pesar de que nuestra relación no era muy allá a la hora de la verdad el tío cumplió y yo se lo pasé a Mario, Iván, … al final creo que lo tenía toda la clase.

· La otra Mercedes: con ella fumábamos en el laboratorio y diseccionábamos ratones vivos, actividades muy entrañables que luego han sido de gran utilidad en mi vida, y sobretodo en 1º de BUP con 15 años recién cumplidos.

· Amancio; el hombre tranquilo nos dio las primeras nociones de dibujo técnico, recuerdo que la nota de los dibujos de casa la negociábamos en su mesa, él tapaba tu nota del examen, pero el anterior a ti miraba la nota y tratabas de llegar al aprobado, yo una vez calculé mal y saqué un bien y prometo que esa no era mi intención.

· D. Julián (QDP): profe de historia en 1º con el que saqué notable y me llevaba muy bien, pero en 2º nos daba latín, un día cogió mis apuntes (desordenados y sucios) y estuve a punto de sacar mi primer muy deficiente, al final conseguí aprobar gracias al libro de Benito que tenía las frases analizadas. Pero me sirvió para aprender que si a alguien bueno le das de lado pierde el interés y puede llegar a ser el peor de la clase, menos mal que mi interés y el libro de Benito hizo que Burriel y yo aprobáramos.

· Begoña: profe de lengua en 1º y de inglés en 2º, tenía un curioso sistema de selección de voluntario para sacar a la pizarra y casi siempre les tocaba a los mismos, algo del tipo “di un número” lo multiplico por dos el sumo el día del mes, le resto el número del mes, hallo el logaritmo neperiano; Eduardo Fernández del Campo a la pizarra, muy grande.

· Manolo: el profe de gimnasia, este nos decía dos vueltas al campo para calentar, vaya tela, el tío decía que era abogado, pero sus leyes eran esas manos de grandes como mi cabeza; y cada vez que blandía una, la gente se acojonaba. Aprendí a correr con vallas, salto de longitud, de altura, … pero sobre todo el test de Cooper, que como un día coja al maldito Cooper no respondo de mi. Las chicas tenían una profe que se llamaba Mercedes pero que obviamente todos llamábamos Manola.

· D. Abundio: profe de física y química de 2º, a mi me cayó mal desde el primer día ya que empezó su primera clase diciendo que lo que nos había enseñado don Melquiades no servía para nada, pero lo peor vino cuando poco después, en concreto el viernes siguiente a la excursión que siempre hacíamos en otoño, nuestro delegado le pidió que no sacara a nadie a la pizarra que con la excursión nadie había hecho los ejercicios; pues a mí se me ocurrió decirle que se había equivocado en un desarrollo, él muy parsimonioso se sentó en su silla y dijo señalándome “usted sus ejercicios”, yo dije que no los tenía y me casco un 0; pero son enseñanzas de la vida, no le toques las pelotas a alguien que las puede tener irritadas.

· Padre Antonio: profe de religión en 2º, un curilla andaluz que nos enseño un puñao de cosas especialmente sobre otras religiones, y encima en Navidad me encontró con mi grupo preparando un Belén para los niños del hospital Gregorio Marañón y desde entonces no me bajé del notable.

· D. Ismael: tutor de 2º y profe de Geografía, la asignatura era muy chula y luego me ha servido en muchas partidas de Trivial, pero la verdad es que él siempre me pareció un personaje bastante gris, muy asimilable al clásico maestro de escuela de pueblo en los años 50.

· Padre Urquía: tutor de 3º y profe de filosofía, una asignatura nueva que a mí al menos me encanto y de la que tengo todavía nociones y que me hizo sentir mayor, la verdad es que debo darle las gracias al padre Urquía por muchas de sus enseñanzas.

· Padre Horodinski: el padre José Antonio Romeo Horodinski es una de las personas más increíbles que me he encontrado en mi vida, nos daba religión en 3º, nos hacía exámenes en sus famosas octavillas, recuerdo que una vez nos dijo que definiéramos a Dios y luego dijo que le diéremos la vuelta al papel y sabiendo que no lo iba a recoger que volviésemos a responder y que en casa o cuando quisiéramos comparáramos las dos respuestas. Luego era el líder de CEMI y también llevaba el Colegio Mayor Chaminade, así que pude hablar de él con un amiguete del curro que fue al Chami.

· D. Pedro, más conocido como el Potos, profe de Física y Química de 3º que desautorizaba a D. Abundio, como veis en mi cole los profes de Física eran como los albañiles, el gremio menos corporativo del mundo, con su clásico “pero señora, ¿quien le ha hecho esta chapuza?”. Aprobé por los pelos, quizá gracias a Blanco, pero en cualquier caso por si acaso el día antes de las notas, un martes de Junio me fui de copas por Bilbao con Mario que estaba en la misma situación que yo.

· D. Pedro, Pedrulo profe de historia en 3º, teníamos que ir a su aula para dar clase de historia, era un aula llena de cosas increíbles, especialmente de latas de cerveza del mundo, que a mí me llamaban mucho la atención. Hizo que definitivamente la historia fuera mi hobbie, pero era un poco despistado el tío, en un examen se sentó al lado mío y no se dio cuenta de que yo ya había terminado mi examen y estaba haciendo el de Isidro, en fin cosas del cole.

· Eduardo: padre de un compañerete de clase y que nos daba biología en 3º, la clase la verdad es que no me llamaba mucho la atención, y a pesar de que teóricamente era evaluación continua a mi me hizo la media del curso, lo único relevante que recuerdo es haberme saltado su última clase para ir a jugar al mus al Retiro, mis únicas pellas en el cole, eso sí con las notas ya publicadas.

· Pilar Caso: profe de literatura en 2º, generaba cierto halo de odio y eso que tampoco era especialmente ogro, pero le fallaban las maneras, os comento que con mi grupo de amigos del cole, con los que gracias a Dios sigo saliendo a echar una copita de vez en cuando, cada vez que se cruza en nuestro camino un chupito de tequila brindamos por “la p… Pilar Caso”, y la penúltima vez que lo hicimos fue un brindis multitudinario en mi boda, en la que más de la mitad de la gente no tenía ni idea de lo que significaba aquello.

lunes, 23 de febrero de 2009

El sacristán que no sabía leer

Este es un cuentito que me contó mi padre hace muchos años y que me hizo reflexionar mucho, sobre si aquello que nos parece que nos va a llevar a conseguir algo realmente es el mejor camino.

El sacristán de la Iglesia de San Juan llevaba más de 30 años cumpliendo sus funciones a satisfacción del anciano párroco, pero un día de marzo de 1902 el anciano parroco falleció debido a su avanzada edad. El nuevo párroco, cura joven, al poco tiempo se percató de que el sacristán no sabía leer y le dijo: "tiene seis meses para aprender a leer o se va". Y como transcurrió el plazo y el único avance del sacristán era apenas firmar, lo despidió, pero le pagó como cuatro años de sueldo y le concedió la casita que había en terrenos de la iglesia para que pudiera vivir tres años gratuitamente con su mujer.

En tanto, el sacristán había observado que las personas fumaban cuando estaban preocupadas, motivo por el cual recorrió varias manzanas a la redonda buscando un puesto de tabaco, sin encontrar ninguno. Le contó a su mujer que lo había despedido el párroco y que buscó tabaco para pasar su preocupación, sin encontrar puesto alguno.

Ella le aconsejó que pusiera uno y así lo hizo. Además, abrió una cuenta de ahorro en el banco para el dinero que le dio el cura y depositar las ganancias del puesto de tabaco. Al cabo de diez años se transformó en el mayor proveedor y diversificó a otros artículos. Mientras tanto, seguía depositando los beneficios en el banco, sin retirar nunca una lira.

Un día que efectuaba el riguroso depósito semanal, el cajero le dijo que el gerente del banco quería hablarle. El gerente lo atendió solícito y le pasó unos formularios de fondos de inversiones que el sacristán hojeó guardando silencio. "¿Qué le parece?", preguntó el gerente. El interpelado continuó en silencio y ante la insistencia de su interlocutor confesó que no sabía leer. "¡Cómo!", exclamó el gerente. "Cómo es esto de que nuestro principal cliente, el que tiene la mayor suma de dinero en nuestro banco no sepa leer. ¿Qué sería usted, si supiera leer? Y el pausadamente respondió: "sería sacristán de la Iglesia de San Juan".

miércoles, 18 de febrero de 2009

Profes II EGB II

Después de mi primera relación de profes del cole vamos a por la segunda, en sexto empezaba EGB II, ya eras mayor; entrabas con 11 años y te cambiaban de clase, yo pasé de la C a la D, allí me encontré con Mario y con mi primo. En este curso ya teníamos un profesor por asignatura, más o menos, definitivamente nos encaminábamos hacía la adolescencia, aún recuerdo cuando pedí mis primeros 501 en las navidades de 7º, vamos con 12 años (y pensar que hoy en día en el coche con esa edad todavía tienes que ir en una sillita especial, ¡¡vaya tela!!).

· Fabiola: no podía empezar por otra, no solo por ser mi tutora en 6º y porque ella fue la primera profe que encontré después de buscar mi nombre en las listas en la entrada del pabellón (para ver en qué clase estaba) sino porque, según mi padre, fue responsable de una enfermedad que padecí durante bastante tiempo y que también afecto a mi hermano mediano, llamada fabiolitis, ella fue el gran amor platónico de mi infancia, hasta el punto que hace un par de años fui a la presentación de un libro sobre Colón (ella, una Chavarri de toda la vida, estaba, quizá hasta lo está todavía hoy, casada con el descendiente directo de Colón); pues no os lo vais a creer pero fui con cierto nivel de nerviosismo a la presentación 20 años después (como en la novela de Alejandro Dumas), lamentablemente no la vi. Era nuestra profe de inglés y si algún día me lee, le mando un beso enorme.

· D. Francisco: profe de Lengua un grande de la educación, lástima que solo nos diera clase en 6º, era un personaje muy divertido y muy duro a la vez; realmente creo que es uno de los mejores profesores que he tenido y eso que impartía una de las asignaturas que menos interés me han producido a lo largo de toda mi etapa escolar

· D. Benito: el de Mates, le tuve en sexto y en séptimo; dadas mis brillantes notas en esta materia siempre hubo buen rollito. Me acuerdo que nos hacía paginar los cuadernos (el de sexto tenía un campo de futbol en la portada, por lo de Benito Villamarín, yo es que” he sio un jashondo toa la via”) para que no arrancáramos hojas, y nunca lo entendí porque yo arrancaba las del final para sucio y nunca paso nada.

· Don Agustín: ya he hablado de él en otra entrada, fue nuestro tutor de 8º, daba Sociales en 6º y lengua en 8º, una combinación curiosa cuando menos, le llamábamos Paquirri por su sorprendente parecido y a pesar de tener nuestros más y nuestros menos guardo buen recuerdo de él.

· Nieves: era nuestra profe de Naturales de 6º y 7º, probablemente la profe más guapa, pero muy chunga y a esa tierna edad todavía el rollito sado no nos iba así que era denostada por casi todos, aunque aún recuerdo cuando Santi lloraba y venía a consolarle, ¡vivan los escotes de los 80! (con perdón a mi público femenino, pero los recuerdos de la infancia son así, inocentes). Me dijo que me iba a suspender en 7º y me puso un notable, si es que no hay como tocarme las narices para motivarme.

· D. Félix: un grande, era nuestro profe de Gimnasia de 6º a 8º, entrenador del filial del Rayito, aún recuerdo aquellas enseñanzas: “el Madrid C tiene un delantero muy figurín, pero ya le he dicho yo a mi central, dos buenas patadas en la primera jugada y ya verás como viene más suave” o su historia del atraco en el bar donde le obligaron a quitarse el anillo plagada de tacos, simplemente genial. Nunca conseguí subir el mástil ni la cuerda ni nada de eso pero sus enseñanzas sobre el atletismo y la gimnasia resultaron con el tiempo interesantes.

· D. Julio (QDP): profe de Dibujo y Trabajos Manuales (Pretecnología en la actualidad, que por lo visto a algún lumbreras del Ministerio debía sonarle mal) en 6º y 7º, lo pasábamos muy bien en sus clases en aulas especiales donde nos pasábamos la hora de coña charlando para que luego nuestros pobres padres se tuvieran que la paliza para hacer los trabajos, los míos fueron aprovechados por mis hermanos pequeños ya que siempre repetía los temas.

· D. Héctor: el de Música desde 5º hasta 1º de BUP, un figurón, el tío decía que vivía en La Moraleja y luego se desplazaba en un R-11 lo que nos hizo sospechar siempre. Pero hay que reconocerle cierto nivel de ingenio, no nos engañemos yo nunca fui un virtuoso de la flauta y un día me dijo que si mis padres me castigaban con ruidos estridentes, a lo que yo respondí que no y él me dijo que porque yo lo hacía con él; a pesar de ser el centro de la burla debo reconocer la brillantez.

· D. Jesús: como no podía ser de otra manera profe de Religión en 6º y 7º era muy peculiar había que entregar un cuaderno en el que teníamos que como mínimo hacer tres hojas por tema, al final de séptimo tuve una época un poco surrealista que no acabo de comprender el bueno de don Jesús. En cualquier caso nos enseñó a manejar la Biblia y los principales personajes.

· D. Ángel: tutor de 7º y profe de Lengua y de Sociales de ese curso, era un tipo al que yo adjetivaría de huraño, nunca encajamos y por su culpa tuve mi primer y único castigo de jueves por la tarde, recuerdo que repitió un examen porque había suspendido toda la clase menos dos, Belte y yo que teníamos una chuleta espectacular y en la repetición pensamos que nos respetaría la nota y no lo hizo aprobó casi todo el mundo menos nosotros dos; luego vendría la sociedad con mi primo, el se estudiaba América del Sur, yo del Norte y si coincidía bien y si nos lo cambiábamos y a correr, notable al final.

· D. Melquiades (QDP): otro profesor de esos míticos, en 8º nos daba Ciencias, Dibujo y Trabajos Manuales. Además de conseguir que nos apasionásemos con la química, que me expusieran un abanico en Sevilla (bueno en realidad a mama, muchas gracias jefa), que fuera el batería de Rick Astley, … incluso que el verano anterior mi familia cenara tortilla francesa cada dos por tres preparando uno de sus trabajos (que al final no se hizo), además de todo esto recuerdo cuando fuimos a comprar al centro de Madrid (mi primer sándwich de Rodilla), los trajes de romanos para la función que íbamos a representar en el viaje de fin de curso de octavo. O aquella vez que recogió los apuntes de todos y luego dijo que al día siguiente habría examen, una tarde divertidísima con Mario, Rando, mi primo y yo tratando de completar los apuntes. Y su gran frase: “el cielo está rojo, mañana hará buen día” del folleto explicativo de sus asignaturas que nos dio el primer día de clase y que yo he utilizado en repetidas ocasiones.

· Mr. Henry: que tuvo en 8º la difícil tarea de dar clases de Inglés después de dos años con Fabiola y encima con un método que podemos definir como mínimo de original, total que yo pensaba que estaba loco y él debía pensar que yo era un incordio.

· D. Lorenzo (QDP): el profe de sociales de 8º que hizo que empezara a apasionarme por la historia y desde entonces es uno de mis mayores hobbies, muchas gracias don Lorenzo.

· Padre Urquijo (QDP): nuestro profe de religión que fue cuando realmente aprendí lo que es ser católico de verdad y probablemente junto con mis padres los mayores responsables de que siga yendo a misa cada domingo.

viernes, 13 de febrero de 2009

Grace miglie

Después de algo más de un año por estas tierras no quiero olvidar a todos los que vinieron a verme cuando estaba por aquí solo y por ello quiero hacerles este pequeño homenaje.

La primera fue Patricia y se entusiasmo con el destino elegido incluso acabo haciendo numerosos viajes a lo largo del año.

Mis padres, junto con Patricia son los únicos que conocieron el piso de Roquetas y pudieron dormirse arrullados por el ruido del mar, cuando vinieron por segunda vez pudieron apreciar lo que había aprendido en unos meses.

Mi hermano pequeño que es el otro que ha venido unas cuantas veces, especialmente memorable el partido contra Italia en la Eurocopa, que acabo ganando España.

Nico e Ysa, los primero no familia que pasaron por Aguadulce a disfrutar de las cañas, con ellos le pillé el gusto al tema de la cometa aunque siga siendo igual de paquete.

La Pineaple, sección masculina, con Rod, Pedro, Juanrez y Pablo pasamos un fin de semana de locura que nos llevo incluso al primer baño del año en Abril.

Ivan y Carol que desde el levante se vinieron a conocer el chiringuito y de paso se llevaron la noticia de que iba a ser padre.

Mi hermano Gonzalo con Quique, lo pasamos muy bien e incluso hay una historia que algún día contaré, yo me fui a Madrid, pero a la vuelta coincidí con Elena.

Vito y Jorge, un mus, unas copas, no estuvo nada mal.

El mítico Coré, disfrutamos de Cabo de Gata, de las cervezas del Alemán, …

Jaime con quien incluso hicimos una excusión por el Cabo de Gata caminando y me enganchó al noble arte de golpear bolas con un palo de hierro.

El Dr. Calvo y Cinthya, aprovechando una boda por el sur se vinieron unos días y con ellos volví a dar una vuelta por el centro de Almería, que lo tenía bastante abandonado.

Hugo, que disfrutó como enano, y nosotros con su presencia; comida y copas durante tres días, fue un planazo.

Javito; la semanilla se nos pasó entre gambas rojas cazadas con arpón, un homenaje a D. Manuel, fotos para facebook de piba y copas muchas copas.

Así que a todos vosotros muchas gracias, lo hemos pasado muy bien y me habéis hecho darme cuenta de que aunque esté aquí estaremos siempre juntos.

jueves, 12 de febrero de 2009

Sopa de Mejillones y bacon

Esta es una receta de mi bisabuela, así que no remontamos a la tradición asturiana del siglo XIX. Preparamos unos mejillones al vapor en una olla y la reservamos. Laminamos un ajo y lo doramos en aceite de oliva; cuando esté bien doradito echamos al aceite puerro y zanahoria cortados en juliana. Cuando la zanahoria esté blandita añadimos bacon cortado en tiras, lo rehogamos bien a fuego medio para el bacon se haga pero no se quede crujiente.

Cuando lo tenemos bien rehogado añadimos harina, podemos usar agaragar, que hará que la sopa tenga menos calorías. Una vez bien mezclado añadimos vino blanco y esperamos a se evapore el alcohol añadimos el caldo que han soltado los mejillones y lo dejamos cocer todo a fuego medio bajo durante media hora más o menos.

Cuando esté a punto añadir los mejillones cinco minutos para que tomen temperatura y servir decorado con huevo duro picado. Y a disfrutarlo que la verdad es que está estupendo

lunes, 2 de febrero de 2009

Profes EGB I

Hoy me he levantado recordando mis días de cole y se me ha ocurrido escribir sobre los profes que tuve y que colaboraron de manera bastante importante en ser como era y como soy, y de algunos de los que me he olvidado (lo cual dice lo poco que colaboraron).

Por orden de aparición como en las series:

· María del Mar; nuestra profe de parvulitos, recuerdo pocas cosas, sé que era morena y que nos daba un vaso de agua fresca después de dormir la siesta por la tarde, que hacíamos 6 fichas por semana (nunca comprendí aquello, teniendo en cuenta que la semana tiene cinco días) y por ello nos ponía chinchetas verdes, amarillas y rojas; una semana que llevaba 5 chinchetas rojas mi mama vino conmigo el viernes para ver como conseguía mi sexta roja (si el que es gafotillas empieza desde jovencito). También recuerdo que por las fichas especiales ponían chinchetas azules, yo de esas conseguí pocas porque entendía que las que contaban eran las otras (el que es práctico también lo es desde peque). Si os preguntáis donde se ponían las chinchetas era en un corcho en el que por orden de lista aparecían nuestras fotos a tamaño carné. Recuerdo el disfraz de pajarillo hecho con papel pinocho amarillo, para la obra. Y por encima de todo estaba el “Jardín Prohibido”, pero eso ya es harina de otro costal.

· Marisa: probablemente mi primer amor platónico, me parecía guapísima y fue la que hizo que nos diéramos cuenta de que estábamos en la C que éramos los mejores y que el blanco era nuestro color. Nos enseñó que la nieve tiene formas maravillosas, cosas que no he acabado de aplicar como los periodos de labranza (la enseñanza de los 80), pero sobretodo las sumas y las restas y la pasión por las matemáticas.

· Araceli: iba de buena y eso, pero con la edad tengo mis serias dudas sobre el tema. En segundo de EGB vi mi primer sujetador negro (y muchos años después sigo teniendo básicamente la misma reacción, y no me refiero a la estrictamente fisiológica, enfermos), os explico un poco ella se metía en el baño a cambiarse y la cerradura era de las llaves antiguas, así que por “orden” mirábamos por la mirilla. En segundo seguíamos escribiendo con lápiz, y a lo largo del curso conforme a tus capacidades conseguías el boli, yo lo conseguí en primavera, pero es que era un poco chapucerillo. Recuerdo que en un momento dado nos dijo que colocaramos los pupitres como quisiéramos y yo me puse en frente de la ventana al final de la clase solo con Belte y nos convertimos en los mejores de la clase y nos colocaron al más trasto a ver si le remontábamos, pero no hubo caso, Scandella era una tela de tipo y la sociedad se disolvió; aunque Belte y yo seguimos siendo amigos. Este año aprendimos a multiplicar que es algo que me fascinaba y me sigue fascinando.

· Eva: era un hueso duro de roer, pero fue el año de la primera comunión y el año que ganamos el campeonato de minifutbol, con un ardid bastante feo es poner a los mejores (y a mí, no sé bien cómo) en el equipo de minifutbol y en el de futbol los más paquetes, al revés que el resto de las clases, y para un año que me había colado en el equipo de los buenos y me iba a enfrentar a mi primo … Recuerdo que un día le pusimos una araña de plástico en la silla, muy en plan serie americana, pero ella se rió de nosotros.

· Don Joaquín: en cuarto ya eras mayor y se acaban las señoritas y pasábamos a los profes, D. Joaquín nos llamaba por los apellidos y aquello me hacía sentir mayor y encima cumplí los 10 años, ya era un tío hecho y derecho, los dictados eran una locura porque yo no quería ser secretaria, pero bueno admitía que serían por algo.

· Don Alfonso: creo que llegue a odiarle, era un señor muy mayor de la antigua escuela y por muy listo que era yo, no le hacía ninguna gracia mi afición a la tertulia, encima con Burguitos y Villa, que los dos sumados eran más bajitos que yo; así que don Alfonso y yo tuvimos nuestras diferencias, pero por suerte el curso acabó y lo único que perdí fue un balón que nos requisó cuando estaba jugando con Mario, de la A pero amigos desde el primer día de párvulos. Eso si hay que reconocer que lo nos enseño de análisis sintáctico me sirvió hasta COU y nunca más volví a estudiar lengua.