Un hombre intentaba mover una roca que había en la mitad del camino, obstruyendo el paso; empujando, usando una rama a modos de palanca,.., y después de intentarlo todo, comprobó que la piedra no se había movido ni un centímetro.
Su padre que lo observaba le gritó:
-Utiliza todas tus fuerzas.
A lo que respondió fatigado el hijo:
- ¿Acaso no ves que lo he intentado todo?, ya no puedo más.
El otro hombre le volvió a gritar:
-No has utilizado aún todas tus fuerzas.
- No le entiendo, padre.
Respondió el hijo, algo enfadado,pero tranquilamente el padre le dijo;
-”NO, TODAVÍA NO ME HAS PEDIDO AYUDA”
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