Mis pas

Lo primero es dar gracias a Dios por ellos, no existe nada perfecto en este mundo, a pesar de la infinidad de cosas que pretenden parecerlo y sin embargo ellos sin pretenderlo son lo más cercano a la perfección. Cuando yo era niño me imaginaba que mi padre era un gigante que todo lo podía y mi madre lo sabía todo, con el tiempo he ido creciendo y tras muchas experiencias me he dado cuenta de que no se trataba de imaginaciones, sino que es la realidad.

Ellos han estado detrás de casi todas las grandes decisiones de mi vida y es que la verdad es me siento tremendamente feliz de poder contar con ellos para no solo compartir mis decisiones con ellos sino que debo agradecerles todos y cada uno de los aciertos de los que he disfrutado y el apoyo recibido en los fracasos, y es que en este caso no es de justicia decir que les debo la vida a mis padres, lo correcto es decir que les debo toda mi vida.

Obviamente ha habido etapas más complicadas en las que pensado “lo equivocados que están mis padres” y la verdad es que a día de hoy cada vez que pienso en alguna de aquellas situaciones, casi siempre debo darles la razón a ellos y si no la tenían con el tiempo he llegado a entender sus razones y a abandonar el sentimiento de arbitrariedad que podía haber en sus decisiones o propuestas.

Creo, al menos a día de hoy (y espero que no cambie), que he llevado una vida plena de experiencias y que me han convertido en una persona razonablemente cabal, y no sería justo no agradecerles el haberme dado todas las oportunidades de las que tanto he disfrutado a lo largo de la vida.

En resumen, simplemente gracias y que me ayuden a poder trasladar todo lo que he aprendido de ellos; mil gracias sois los mejores.

Ensaladas

Pasta con judías verdes: poner a hervir pasta, añadid a media cocción judías verdes y patata cocida desmigada. Preparar un pesto machacando albahaca fresca y sal, luego piñones crudos, mezclarlo y añadir aceite y queso parmesano. Tostar unos piñones con unas gotas de aceite. En un plato poner primero la pasta y la verdura, luego los piñones, cubrir con pesto y añadir un poco de agua de cocción para obtener más untuosidad.

Queso azul con atún, sobre una base de tomate y lechuga añadir atún y queso azul desmigado, aliñar con sal, vinagre de manzana, miel y aceite. Mezclar hasta que se deshaga el queso.

Espinacas frescas, bacón tostado, picatostes y un huevo poché; aderezado con zumo de naranja, aceto balsámico y aceite de oliva.

Cocer unas patatas triscadas y en un bol mezclarlas con aceite, el agua de cocción, limón, ralladura de limón, alcaparras y eneldo. Cubrimos el fondo de un plato de salmón ahumado y unos pegotes de queso blanco y encima echamos las patatas.

Patata cocida, tomate, cebolla y melva, bien aderezado con ajo picado, orégano, aceite de oliva virgen y vinagre de Jerez. Otra variación es arroz, pimientos de lata y la cebolla un poco pochada, con su tomatito y su melva (o caballa, o atún)

Colocar en el fondo de una bandeja grande espinacas y champiñones laminados todo ello crudo, aderezar con ajo picado, pimienta, sal y la misma cantidad de aceite que de vinagre o limón. En una sartén con ajo y cayena saltear unas gulas y verter sobre la bandeja con el aceite. Preparar unos huevos poché, separar las yemas de las claras, picar las claras y echarlas por encima y luego colocar las yemas para romperlas al llegar a la mesa. He probado una variación sin champiñones ni huevos poche y con palmitos y almendras tostadas, aderezada con una vinagreta de huevo duro (sí, se pasaron los huevos) que supera a la original.

La ensalada Cesar del gran Jaimie: se marina el pollo troceado durante al menos una hora en aceite, sal, orégano y romero. Mientras preparamos la salsa con anchoas, ajo, limón, aceite, pimienta, mostaza, soja y queso parmesano rallado. Ponemos el horno a 200º y se mete el pollo, a la media hora al darle la vuelta en el fondo de la bandeja colocamos pan, luego el pollo y lo cubrimos con lonchas de bacon y se tiene unos 20 minutos más. Para servir primero se hace una buena capa de lechuga (mantecosa o romana, nunca lollo rosso ni escarola), se pueden añadir también canónigos; luego desmenuzamos el pollo y cortamos el bacon y el pan en dados y los colocamos todo encima de las lechugas y después aderezamos con la salsa.

Berenjenas rellenas

Es una receta clásica y de las primeras recetas de quedar bien que aprende la gente, hay muchas variantes yo os voy a contar la mía que no lleva bechamel y que está, a mi parecer, bien buena.
Cortamos las berenjenas por la mitad longitudinalmente y las vaciamos, es una tarea delicada porque hay que procurar no romper la piel y que se queden unas barcas. La carne que hemos sacada de la berenjena la picamos en dados de un par de centímetros y las ponemos en una bandeja de horno con aceite y sal gorda, a 100º durante unos 45 minutos.

Picamos cebolla, puerro y pimiento y lo vamos echando a una olla con aceite en este orden, mientras las verduras se van pochando picamos ajo y lo mezclamos con la carne picada, aderezamos con un poco de ají molido (podéis utilizar otra variación con las hierbas que le van bien a la carne de ternera) y lo añadimos a la olla que está a fuego medio y con las verduras blandas. Moved bien la carne hasta que se desligue del todo y en ese momento echamos una taza de salsa de tomate (tomate triturado que hemos aderezado con sal, azúcar y orégano y calentado en una sartén cinco minutos). Cuando todos los elementos estén bien mezclados, echamos unos quesitos que le darán cremosidad y sacamos al berenjena del horno y se la añadimos a la olla, bajamos el fuego al mínimo y dejamos cocer unos 10 ó 15 minutos.

Cuando la farsa (relleno) esté listo, vamos rellenando nuestras barcas de berenjena y cubrimos con queso para gratinar. Metemos al horno a 200º hasta que el queso se dore. Y a la mesa a disfrutad de un nuevo reto alcanzado por ese pequeño chef que todos llevamos dentro.