jueves, 21 de julio de 2016

Página cinco

Estaba allí sentado tomando un café, él nunca pedía café, pero esa mañana había decidido que tenía que introducir algunos cambios en su vida y había empezado por el café. Sentado en la vieja cafetería ojeaba con desgana el periódico que había en la barra, hasta que encontró algo que le hizo detenerse, la página cinco. Una noticia que no podía creer. No la leía, devoraba las palabras, mientras rememoraba esos días hoy ya lejanos. Él había formado parte de aquello, él había estado en Perisur y hoy estaba allí tomando un café. Miró el reloj y se dio cuenta de que perdía el tren, pero aún así no movió un musculo, siguió allí sentado leyendo la página cinco del periódico una y otra vez, mientras su mente volaba lejos de aquella barra de metal y volvió a mirar el reloj, esta vez apuró el café, dejó unas monedas en la barra y salió a la calle. La noticia de la página cinco del periódico había hecho estragos en su cerebro, había pasado mucho tiempo desde que su vida había vuelto a la cotidianidad, una normalidad con la que había soñado tantas noches en las que no podía dormir y que ahora de un plumazo, había barrido la página cinco del periódico. Entró en otra cafetería y volvió a pedir café, iban dos aquella mañana que prácticamente no había empezado, se lo sirvieron en un vaso para llevar, cogió el periódico y se dirigió al tren. Una vez sentado en su asiento de cada mañana, pero en un tren distinto se dejó llevar. En su cabeza empezaron a sonar de nuevo los últimos acordes y las miles de gargantas repitiendo una letra que había salido de sus entrañas, fue en ese instante cuando volvió a ser consciente de todo, tiró el café y salió corriendo, pero el tren ya había arrancado.

viernes, 29 de junio de 2012

Canelones de acelga rellenos de mejillones en hojaldre

Hoy he visto esta receta a Bruno Oteiza y la verdad es que me ha parecido muy interesante, así que aquí está para hacerla prontito. Para dos personas Haremos cuatro tiras de hojaldre del tamaño que queramos darle a los canelones, colocamos dos en una bandeja de horno y las untamos de huevo y luego encima las otras dos y volvemos a untar de huevo y al horno a 180º hasta que estén doradas. En una olla ponemos un poco de aceite y pochamos cebolla, puerro, ajo y pimiento verde (podemos improvisar un poco con las verduras). Cuando estén medio pochaditas añadimos los mejillones y al ratín un poco de brandy. Cuando se haya evaporado el alcohol añadimos salsa de tomate ya preparada y salsa picante. Una vez abiertos los mejillones los retiramos, los sacamos de las conchas y los picamos. Colamos la salsa y la ligamos un poco. Cogemos unas hojas de acelga, le quitamos la penca central y las escaldamos para poder trabajar con ellas y rellenarlas del mejillos picado haciendo canelones. Para presentarlo conrtamos los hojaldres, volviendo a tener las 4 tiras y ponemos una mitad en el plato, encima colocamos el canelon de acelga napamos y cubrimos con la otra mitad.

lunes, 25 de junio de 2012

Cosas que pasan

Hubo unos días en los que vivías despreocupado, con pequeñas obligaciones que iban en aumento, pero sin grandes responsabilidades, convirtiéndote en persona y creciendo con la vida. Poco a poco la vida va cargándote de peso, siempre con la inestimable ayuda de uno mismo; vas viendo lo que hay a tu alrededor, las personas que te acompañan en este viaje, sientes su cariño y ayuda. A veces echas la vista atrás y ves gente que se ha ido separando de tu camino, lo más o menos importantes que fueron y las razones por las que se separaron, las alegrías que compartiste con ellos y alguna tristeza. Pero la vida, que es muy de jugar, a veces te las devuelve y te sorprende, te deja mudo y con esa sensación de ¿dónde estuviste todos estos años? Pero no es el momento de pararse a ver qué pudo pasar o qué pasó, sino de disfrutar de lo que está pasando, el pasado son solo recuerdos y el futuro no existe. Últimamente la vida me he hecho un regalo, sí otro más, es que no deja de mimarme; que como no podía ser de otra manera me ha dejado mudo y vuelvo a disfrutar de amaneceres infinitos. De pronto se altera un orden de valores prestablecido mucho tiempo atrás y que no había sido revisado nunca, de pronto la distancia no es más que una sensación a la que no hacer demasiado caso, de pronto las sonrisas son más grandes y los silencios más cortos, de pronto todo cobra sentido y eres feliz.

martes, 12 de junio de 2012

Dos palabras

De pronto alguien te mira a los ojos y te dice dos palabras y en eso momento no existe nada más, tu cerebro se para durante unas micras de segundo y es como si le hubiese atravesado un tren de mercancías. Notar una mirada clavada en esos momentos cruciales y devolver la mirada mientras tu cerebro vuelve a ponerse en marcha, sientes el latido acelerado del corazón y tus músculos tensarse. Son dos palabras, pero no hacen falta más y tu vida cambia, los sentimientos se acentúan y te sientes desarmado. En ese momento gritarías fuerte, tienes mucha energía que liberar y sin embargo te quedas paralizado, solo puedes gesticular algo mientras la sangre vuelve a fluir. Son dos palabras y dejas de ser todo lo que eras y compruebas que eres vulnerable, que nadie es perfecto y el poder que tienen solo dos palabras.

viernes, 1 de junio de 2012

Mejillones al ras el hanout

Otra recetilla fácil y barata, de las que también os hará quedar como auténticos chefs, y encima con el sabor exótico del ras el hanout. En una sartén bien caliente y con un buen chorro de aceite sofreimos cebolla y tomate seco que previamente habremos hidratado en aceite de oliva. Cuando esté todo bien pochado añadir ras-el-hanut, cuidadin que tiene un sabor intenso no abuséis si no lo conocéis. Un par de vueltas y añadimos unas verduras que hemos preparado previamente al vapor (patatas, guisantes, zanahorias y judias verdes) para que no pierdan su color, un par de vueltas y añadimos unos mejillones límpios y cuando se abran ya tendremos el plato listo.

Presa Ibérica al Jerez

Esta es una receta bastante curiosa y desde luego treméndamente sabrosa, desde luego no es nada difícil y como siempre el cerdo gusta mucho y es barato, así que os animo a prepararla. En una sartén bien caliente echamos un poco de aceite de oliva y sellamos las piezas de presa presa, las retiramos del fuego y en la sartén añadimos mantequilla, donde sofreiremos cebolla picada fina; cuando esté transparente añadimos unas castañas y al final setas y pasas. Cuando esté todo bien reogado devolvemos la carne a la sartén y echamos un vaso de vino de Jerez y otro de moscatel; cuando se haya evaporado el alcohol cubrimos con caldo de carne. Vamos a preparar una guarnición un poquito especial, para ello freimos unas patatas, cuando estén listas las retiramos y quitamos aceite de la sartén donde echamos nata, rallamos una buena cantidad de queso (elegid el que más os guste que quedará bien desde azul hasta tierno) en la nata; esperaremos a que se derrita y echamos las patatas que habíamos retirado y para finalizar un golpe de orégano. Y ale a disfrutarlo

miércoles, 30 de mayo de 2012

Milhojas de berejena

Esta es una receta que más bien se trata de una guarnición, pero la presentación y el sabor son espectaculares. Cortamos la berenjena en rodajas y la freimos en abundante aceite de oliva, retiramos a un plato con un papel de cocina para que absorva el excedente de grasa. También prepararemos una salsa de tomate, pochando la cebolla, con algo de ajo y teniendo el tomate friendose durante un tiempo prolongado, le podemos añadir romero y tomillo. En una fuente de horno poner salsa de tomate, encima la berenjena frita y cubrimos con queso rallado; repetir varias veces y acabar con pan rallado. Metemos en el horno precalentado a 200º unos cinco minutos y listo para comer. Como os decía puede ser una buena guarnición, por ejemplo para una merluza rebozada haciendo el rebozado con agua con gas, para que quede más esponjosa; eso sí en este caso a la salsa de tomate no es muy conveniente añadirle romero.