El otro día estaba en una fiesta y alguien me preguntó ¿de dónde eres? Y la verdad es que en ese momento no supe bien que responder, y lo peor es que ahora un par de días después sigo sin saber contestar.
Nací en Madrid y hasta hace bien poco he vivido toda mi vida en Madrid; pero mi familia paterna es de León y con un sentimiento muy arraigado. En sexto de EGB (11-12 años, para las víctimas de la LOGSE) empecé a ir a clase con mi primo y siempre hacíamos los trabajos de Sociales referenciados a León, es más aún recuerdo como D. Agustín siempre decía a ver uno de los de León que nos lean su trabajo. Después, en cuanto tuve el carné de conducir era el rincón al que me escapaba y al que iba con mi hermano pequeño o con mi primo a disfrutar de nuestra tierra.
Por otro lado nací en Marzo y ese mismo Agosto ya fui de veraneo a Murcia, el hogar de mi abuelo materno, y allí me alcanzó la adolescencia y mi primer beso; luego muchísimas historias más con las que escribir un libro, por lo que siento que formo parte de esa tierra, o con un poco de humildad que esa tierra forma parte de mi. Hasta el punto de casarme allí, pero eso ya es otra historia (Ende, perdone por este abuso).
También hay que tener en cuenta que mi madre nació en Oviedo, y además mi abuela era muy asturiana y siempre nos hablaba de niños de lo bonita que es la tierra de nuestros antepasados y sobretodo que “Asturies ye España, el resto ye tierra conquistada”. Y aunque he estado pocas veces en Asturias cada vez que piso suelo Astur un escalofrío me recorre la espalda.
Mi bisabuela, a la que tuve la suerte de disfrutar hasta los 15 años, era de Yunquera en el corredor del Henares en la provincia de Guadalajara, siempre nos contaba cómo vivía la gente a principios del siglo XX allí, la verdad es que me fascinaban esas historias y tengo cierto apego por ese pueblin.
Como os he comentado al principio ahora ya no vivo en Madrid, vivo en Almería y cada día me siento más almeriense, uno se acostumbra a los hábitos locales y … de todas maneras como negarse a vivir siempre en la calle, a la playita, las tapas, ... y llevo el Indalo grabado a fuego en el corazón.
Y ya saliendo de España, mi padre se crió en Argentina (aunque nació en León a los 4 años se fue para allá) y siempre he sentido ese país como mi segunda patria (con perdón de la palabra) y Buenos Aires como mi casa, es más muchos de mis amigos me llaman argentino, y mira que les he explicado que el argentino no existe, yo desde luego nunca he conocido uno; toda la gente que he conocido en mis viajes a Argentina eran españoles, italianos, judíos, libaneses, … pero argentinos ni uno, a ver si al final voy a ser el único argentino del mundo.
Por otro lado en Chelsea hay un rinconcito que siempre será nuestro rincón, ¿verdad cariño? Sé que Tianjin siempre será mi casa, Roma siempre tendrá un hueco en mi corazón, Ericeria es un escondite, Budapest tiene nuestra firma y nosotros la suya, La Perle du Prague el restaurante más romántico donde te puedes declarar, Eslovenia es un sentimiento, Perú el lugar donde cumplí uno de mis mayores sueños, el barrio de la Viña es Cádiz en estado puro, …
Así que sigo sin saber cómo contestar, a ver si ayudáis. Porque me niego a creer que lo de ciudadano del mundo tenga su explicación y no sea simplemente una pedantería ridícula.
lunes, 11 de agosto de 2008
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